La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

ELECCIONES 2015 | Candidato a la reelección a la Presidencia regional por el PSOE

Javier Fernández: "Asturias sabe lo que es gobernar con incertidumbre, necesitamos estabilidad"

"Con Villa actuamos de forma contundente, no tenemos miedo a lo que puedan contar los corruptos"

Javier Fernández: "Asturias sabe lo que es gobernar con incertidumbre, necesitamos estabilidad"

Javier Fernández se presenta por tercera vez a unas elecciones en Asturias como cabeza de lista del PSOE, y las encuestas le dan como favorito. Más allá de los sondeos, asegura que está sintiendo más apoyo ciudadano que en otras ocasiones, aunque parezca abocado a gobernar con minoría en la Junta General.

-¿Se ven gobernando en lo que se podría llamar una minoría absoluta?

-Es una posibilidad que ya ha ocurrido en el pasado. Me preocupa la responsabilidad que todos seamos capaces de asumir, en el gobierno y en la oposición. He tenido estabilidad parlamentaria en un ejercicio, y no era fácil, con dos socios (IU y UPyD) muy distintos entre sí. Después, cuando rompieron ese acuerdo de estabilidad, me vi obligado al día a día, una incertidumbre enorme.

-Prefiere los pactos a los acuerdos concretos.

-No podemos anticipar lo que va a ocurrir, pero sí sabemos lo que ya ha ocurrido. Asturias ha sido un laboratorio, anticipó la fragmentación parlamentaria. Los asturianos ya sabemos de qué va esto, sabemos que es muy difícil ese acuerdo diario, que arroja incertidumbre sobre aspectos esenciales de la gestión política. Esperamos lograr una mayor estabilidad.

-¿Con qué fuerza política tienen más afinidad?

-De quien estoy más alejado es de Foro. Es un partido y fue un gobierno que produjo muchas heridas y deja muchas cicatrices en Asturias. Más allá de su populismo rampante, en sus propuestas sobre sanidad, educación, fiscalidad, no se diferencia del PP. Con ambos tengo una diferencia profunda, de base. Con Podemos, siento muy poca empatía personal, viene con planteamientos disyuntivos, de la gente y la casta, los decentes y los corruptos, y me incluye en ese segundo componente. Desde el punto de vista ideológico, puedo estar de acuerdo con alguno de los problemas que señala, pero no creo en sus soluciones milagrosas, esta gente no conoce los problemas de Asturias y no plantea soluciones realistas. A Ciudadanos no les conozco, parecen una derecha menos rocosa que el PP en lo social, pero neoliberal en lo económico. Habrá que ver qué pasa.

-Podemos le lanza el anzuelo a sus votantes tradicionales, "socialistas de corazón". ¿Se lo merece el PSOE?

-Todos los partidos deben ser humildes, y el PSOE ha cometido errores, pero no se puede ir siempre con el cilicio. Hemos hecho muchas cosas valiosas por este país, y tenemos claro lo que queremos hacer. No vamos a simplificar los problemas: alguien tiene que gestionar la complejidad, económica, social y parlamentaria. No se me ocurre otro partido que lo pueda hacer, y espero que los asturianos opinen lo mismo.

-Una de las preocupaciones de los ciudadanos es la corrupción. ¿Cree, como Esperanza Aguirre, que no hay corrupción, hay corruptos?

-No. Como decía Séneca, la corrupción es un vicio de los hombres, no de los tiempos. No creo, sin embargo, que haya corrupción sistémica: eso ocurre cuando el sistema, para funcionar, necesita de conductas corruptas. Eso, honradamente, no veo que exista. Sí es un gravísimo mal social que hay que combatir: o la combates, o acabas formando parte de ella. Para combatirla no hay que tener miedo a lo que sepan o a lo que puedan decir de ti los corrompidos. Yo no tengo ningún miedo, y por eso actué con la contundencia con la que lo hice en el caso de José Ángel Fernández Villa. Espero que los ciudadanos lo tengan en cuenta.

-No cree, entonces, que el caso Villa tenga coste electoral en las Cuencas.

-No lo sé, pero sí sé que actué con toda contundencia. Tuve la seguridad de que lo que publicaba un medio de comunicación era cierto porque él (Villa) no lo negó. Y le expulsé. Con toda transparencia, no me he opuesto a ninguna investigación.

-¿Era usted lo que se puede llamar un hombre de Villa?

-No, yo soy un hombre del PSOE, y tuve una relación personal y política con Fernández Villa, que tuvo una influencia directa en que yo fuera diputado. Fue una relación con las contradicciones inevitables que se generan en política.

-El Musel, el caso de los palacios, parece que hay más denuncias en época electoral.

-No comento los casos que están en vía judicial, pero creo que los palacios es un debate municipal,. y en cuanto al Musel, me preocupa que no se entienda que se trata de una de las piedras angulares del futuro de Asturias.

Compartir el artículo

stats