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Un estreno para la despedida

La actriz candasina Verónica Gutiérrez se ríe de "los políticos malos" en un remedo irónico del último mitin de campaña escenificado ayer en Avilés

Verónica Gutiérrez posa junto al cartel "electoral" que anuncia su obra, ayer, en Avilés. RICARDO SOLÍS

Consuelo de Todos los Santos advierte de que no le va a quedar más remedio que presentarse también a las generales. Anoche, en un bar del centro de Avilés, mientras todo el centro de Asturias era un gran mitin de clausura de campaña, ella cerró la suya para las autonómicas prometiendo a manos llenas. "Trabajo, mucho trabajo, mucho, mucho... Va a haber trabajo... Puf, yo qué sé el trabajo que va a haber... ¡mucho, mucho!" Consuelo se ha escapado de una obra de teatro en proceso de composición que se ríe de los malos políticos combatiéndolos con la artillería de la sorna y la ironía. Consuelo es Verónica Gutiérrez, la actriz candasina que escribe la comedia, que da vida a la protagonista y que precisamente ayer, al cerrarse la temporada oficial de promesas y proyectos electorales, presentó en sociedad al personaje escenificando la arenga de fin de campaña de la caricatura de una líder política. Era la cara B del cierre "serio" de la rivalidad electoral, la versión libre de la última noche de petición del voto, el debut y despedida de un monólogo breve y el adelanto de lo que va a ser la obra larga. También la amenaza de lo que va a venir después, porque ella ya lo ha dicho, no va a poder dejar de reírse hasta las generales. "A lo mejor hay que cambiar el texto un poco, pero me voy a presentar seguro".

Habla la aspirante a la presidencia del Principado por el CDSA, que retorciendo mucho la teoría del acróstico lo mismo puede ser "Ciudadanos Demócratas de Asturias" que, llegado el caso, referirse a las iniciales del nombre de la protagonista. En la comedia que Verónica Gutiérrez escribe sobre la mala política, "Consuelo es simplemente concejala", pero el abundante material dramático que aportaba la campaña electoral decidió a la autora a sacar al personaje de la obra, "me vine arriba y la presenté a la presidencia del Principado". Ayer debutó en la despedida de la campaña, escenificando un avance sin título que se anunciaba mediante un cartel electoral del CDSA con el eslogan corregido -"El partido a su medida" convertido sobre la marcha en "El partido a tu medida"- y una presentación de la cabeza de lista: "Tras muchos años de concejala en un partido y lugar de cuyo nombre no quiere acordarse, ahora se presenta a la presidencia de Asturias".

Consuelo no consuela. Encarna todo lo peor de los políticos malos, "es un poco altiva", "miente más que habla" y en un momento del monólogo anima a los espectadores a que le hagan preguntas y se va a la barra a tomar algo, dejándolos con una televisión de plasma en la que las respuestas están grabadas y nunca contestan a las preguntas. Y aunque no todo tiene aquí un referente auténtico tan evidente, la mayor parte está extraído de la realidad. "Más que basado en hechos reales", el personaje revuelve "pequeñas ideas" aportadas por "muchísimos políticos de la escena actual española", dice la autora. Muchos, precisa, que "parece que te están pidiendo que lo hagas"; muchos que hacen cosas que "no puedes creer que sean reales" y demuestran que "es absolutamente cierto que a veces la realidad supera a la ficción".

Esta ficción, avance de lo que será una comedia con altas dosis de acidez, quiere ser "una crítica a todos los malos políticos". "No soy de las que piensa que son todos iguales, sé que hay muchos honrados, pero se ven más los peores", lamenta Gutiérrez, muy agradecida porque fueron ellos, asegura, los que "me dieron el texto casi hecho". Tomando un gazapo de aquí y otro de allá, riéndose de sus errores y de "cómo intentan justificar las meteduras de pata", sólo había que ordenar y añadir "humor e ironía". Y no va por nadie. Ningún partido, ningún político, advierte, "debería sentirse identificado. Si se ven reflejados, es porque algo han hecho mal", razona. El caso es que "con el humor siempre llegan mucho mejor las cosas a la gente" y que el cabreo de un sector que sufre tenía que salir por algún sitio. Ella sigue "peleando" en el teatro afligido de la crisis y el 21 por ciento de IVA cultural. Además de trabajar para otras compañías, ahora tiene la suya, "É Vero Teatro", y escribe, dirige produce, actúa...

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