El socialista Javier Fernández y la popular Mercedes Fernández optarán mañana nuevo a la Presidencia del Principado en la segunda votación que celebrará el Parlamento regional dentro de la sesión de investidura después de que ninguno obtuviera ayer la mayoría absoluta requerida en la primera ronda.

En la sesión de mañana ya no concurrirá el candidato de Podemos, Emilio León, que ayer quedó fuera de la carrera por la Presidencia al obtener únicamente el respaldo de sus nueve diputados frente a los catorce del PSOE y a los once del PP mientras que IU (5 escaños) y Foro y Ciudadanos, ambos con tres, se abstuvieron.

La normativa asturiana impide votar en contra en el proceso de elección del presidente, cargo que recaerá en el candidato que en la segunda votación obtenga más votos lo que otorga las mayores posibilidades al socialista Javier Fernández, que afrontaría así su segundo y último mandato al frente del Ejecutivo regional.

Tras el resultado registrado en la primera votación, el portavoz de Podemos, Emilio León, ha vuelto a lamentar hoy que IU pusiera con su abstención "una alfombra roja" para impedir que el PP no llegase a la segunda ronda y que en la misma se enfrentasen el candidato socialista y el de la formación morada.

Según León, el objetivo de su partido siempre ha sido "impedir que en Asturias gobernasen las políticas de Rajoy" y ha emplazado al candidato socialista a definir si está dispuesto o no aplicarlas, como en el caso del desarrollo de la reforma educativa, una actitud de la que, ha asegurado, dependerá el voto de Podemos.

También se ha pronunciado sobre la votación de mañana el coordinador general de IU-Asturias, Manuel González Orviz, que ha abogado por un acuerdo de última hora que permita la constitución del gobierno "fuerte y progresista" que la coalición viene reclamando desde que se celebraron las elecciones el 24 de mayo.

"Asturias necesita un Gobierno fuerte para mejorar las condiciones de vida de la gente. No caben excusas", ha señalado Orviz, que ha pedido que no se deje pasar la oportunidad de conformar un gobierno estable que cuente con el respaldo de la mayoría absoluta que le darían los 28 diputados de las tres formaciones.

Orviz ha rechazado las críticas de Podemos y ha advertido de que la 'alfombra' de la que hablan debe llevar "a todos los domicilios de Asturias comida, trabajo y derechos" a la vez que ha lamentado que haya gente que aún no haya aprendido "a dialogar, a reconocerse y a respetarse".

Por su parte, el PP anunció que intentaría obtener todavía el respaldo de Foro y de Ciudadanos y, en caso de obtenerlo en uno de los dos casos, se produciría un empate que obligaría a repetir la votación aunque la formación naranja ha descartado esta posibilidad y el partido fundado por Álvarez-Cascos reprochó a los populares que no les apoyasen en 2011 cuando ambos sumaban mayoría absoluta.

De confirmarse su elección, Fernández, el quinto presidente socialista de los siete que ha tenido Asturias, afrontaría su segundo mandato tras una legislatura de sólo tres años después de vencer en las elecciones de 2012, las primeras anticipadas en la historia del Principado por la decisión de Francisco Álvarez-Cascos de disolver la Junta General tras once meses de gobierno.

En caso de que transcurriesen dos meses a partir de la constitución del Parlamento (16 de junio) sin que ninguno de los candidatos fuese elegido, la Junta General quedaría disuelta y se procedería a la convocatoria de nuevas elecciones.