Asturias tiene desde ayer su tercer Patrimonio de la Humanidad tras el Prerrománico y las cuevas del Paleolítico. Los Caminos de Santiago por el Norte de España fueron refrendados por el Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco en su reunión anual, celebrada en Bonn (Alemania). Una candidatura avalada por el Estado español y en la que participaron cinco comunidades: País Vasco, La Rioja, Cantabria, Asturias y Galicia. La consejera de Cultura, Ana González, fue la encargada de agradecer al plenario la aprobación de un proyecto nacido en 2006, aparcado unos años y ahora, por fin, convertido en realidad.

"Ha sido un camino largo y difícil. Es verdad que la candidatura es conjunta pero si Asturias no hubiera apostado por ella como lo hizo no se hubiera conseguido llegar a buen puerto" afirmaba ayer el director general de Patrimonio del Principado, Adolfo Rodríguez Asensio, desde Bonn minutos después de finalizar el plenario. Asturias ha sido la comunidad autónoma encargada de coordinar los trabajos técnicos que concluyeron con esta declaración.

Los Caminos del Norte incluyen 1.499 kilómetros y cuatro tramos muy diferenciados. El principal, de 936 kilómetros, transcurre a lo largo de toda la costa. En Asturias entra por la ría de Tinamayor y se despide por la ría del Eo. El segundo tramo es el llamado Camino Primitivo, el que dice la tradición que utilizó el rey Alfonso II para dirigirse a Compostela. Empieza en Oviedo y discurre por Las Regueras, Grado, Salas, Tineo, Allande y Grandas, camino de Fonsagrada. Son 311 kilómetros hasta Compostela.

El Camino Interior es también llamado Camino Vasco Riojano. Tiene una longitud de 196 kilómetros y va desde San Sebastián hasta Santo Domingo de La Calzada, donde conecta con el Camino Francés, la gran ruta española con destino final en Santiago. Por último, la Unesco da galones al Camino Lebaniego, un ramal de 55 kilómetros que desde la confluencia costera de Asturias y Cantabria, llega hasta el monasterio de Santo Toribio de Liébana, muy cerca de Potes.

La Consejera Ana González resaltó "lo que fue" el Camino en la construcción de Europa "y lo que tiene que seguir siendo, un lugar de punto de unión de personas con voces distintas". Tras la reunión del Comité de Patrimonio, González pedía a través de LA NUEVA ESPAÑA "corresponsabilidad general" a la hora de afrontar las obligaciones que el nuevo estatus marca: "desde los peregrinos a la Administración".

La delegación asturiana se había presentado en Bonn con la tranquilidad que le daba el conocer la valoración altamente positiva que la Unesco había hecho de la candidatura. "Lo supimos en mayo y eso fue fundamental, pero uno entra al plenario siempre con alguna duda por si surgen imprevistos", reconocía ayer el director general de Patrimonio, Adolfo Rodríguez Asensio.

No los hubo. Un portavoz de Icomos Internacional, la ONG que se encarga de la evaluación de las candidaturas, la explicó en apenas diez minutos. Hubo dos intervenciones de representantes de los países miembros del Comité de Patrimonio, y la presidenta de la asamblea declaró la inscripción, justo antes de que la consejera de Cultura, Ana González, agradeciera durante dos minutos la decisión. Todo medido al milímetro.

Treinta concejos asturianos se ven beneficiados de la declaración de Patrimonio de la Humanidad. El Camino Primitivo discurre por siete de ellos. Los municipios representados en la Ruta de la Costa son Ribadedeva, Llanes, Ribadesella, Caravia, Colunga, Villaviciosa, Sariego, Siero, Oviedo, Gijón, Carreño, Corvera, Avilés, Castrillón, Soto del Barco, Muros de Nalón, Cudillero, Valdés, Navia, Coaña, El Franco, Tapia de Casariego, Castropol y Vegadeo.

Oviedo entra en ambos tramos. Siero y Sariego, por su parte, ejercen aquí de municipio de enlace entre la ruta costera y el camino interior.