Educación se comprometió ayer públicamente a mantener sin un solo despido la plantilla de educadores de las escuelas de niños menores de tres años, las del primer ciclo de Infantil. Era una exigencia que el grupo parlamentario de IU había planteado basándose en los acuerdos de investidura presidencial con el PSOE, y que el consejero Genaro Alonso lo confirmó ayer: "Si la matrícula aumenta, revisaremos al alza las plantillas, pero si se produce un descenso respecto a la registrada hasta ahora, las mantendremos porque queremos reforzar la atención y la calidad en esta etapa", anunció el consejero.

La medida afecta a unas 550 personas, la plantilla al completo de la red de escuelas de primer ciclo que cubre aproximadamente la mitad de los concejos asturianos.

El plazo de matriculación concluirá a finales de septiembre. La Administración cree que puede haber una matrícula inferior a los 3.800 niños. Si fuera superior, Educación se compromete a aumentar plantilla. En caso contrario, el mantenimiento del número de educadores supondría mejorar las ratios en clase.

La planificación de la Consejería para el próximo curso contempla una ratio media de 6,66 niños por técnico de educación infantil y que ninguna escuela supere el máximo de 8,36 alumnos por educador. En algunos centros, esta relación se sitúa incluso en 3,5 niños por técnico, señaló ayer el consejero Alonso.

El Principado ya dibuja su nuevo mapa para las escuelas de bebés, tras las alegaciones presentadas por los centros educativos. Las dos aulas municipales de Educación Infantil del Ayuntamiento de Carreño, conocidas popularmente como aulas maternales, se integrarán este curso en la red pública. Estas clases, ubicadas en los colegios públicos San Félix y Poeta Antón, de Candás, funcionan desde hace más de 20 años como servicio municipal.

Aumento paulatino

Habrá, por otra parte, un aula más en la Escuela de Educación Infantil El Quirinal, en Avilés, y ya es seguro que se mantendrá la misma plantilla de técnicos del curso pasado en la de Mieres. El resto de los casos se analizarán una vez cerrado el proceso de matrícula para un curso en el que se deberá definir un modelo definitivo y consensuado para esta primera etapa educativa.

La idea es centrarse a corto plazo en la franja de edad entre los dos y los tres años. La Consejería de Educación apuesta por habilitar espacios en los colegios públicos o en aquellas escuelas infantiles que lo permitan. "Se trata de aumentar paulatinamente la oferta de plazas", se explicaba ayer en una nota de la Consejería, cuyos responsables prometen "revisar las cuotas mensuales" que abonan los padres de los niños escolarizados y "buscar fórmulas" para ampliar el horario de media jornada de los técnicos de Educación Infantil hasta las cuatro horas diarias.