Un asturiano que se viera obligado a comprar ayer un billete convencional de ida y vuelta para volar hoy a Madrid con Iberia no lo habrá encontrado a la venta por menos de 408 euros. Es el mismo precio mínimo que regía para hacer el desplazamiento a mediados de la semana que viene, mientras que para viajar a Barajas el día 8 y volver a la región el día 10 el billete más barato oscilaba ayer entre los 423 y los 428 euros. Todos estos precios consultados al azar en la página web de la compañía superan los 400 euros, pese a que Iberia, que realiza la ruta con la capital de España en solitario, lidera una unión temporal de empresas (UTE) en la que también está Vueling, que recibe anualmente 1,5 millones de euros de la Administración autonómica en virtud de un acuerdo que no le obliga ni a abrir nuevas rutas ni a potenciar las frecuencias que ya están en servicio.
Bajo el paraguas de ese acuerdo, Iberia sí que aplica desde comienzos de este año una serie de promociones en Santiago del Monte, pero éstas no afectan a los billetes convencionales. Se trata de una tarifa plana para viajes de ida y vuelta a 299 euros limitada a quienes dispongan de la tarjeta empresarial de la compañía, de ofertas de fines de semana, con la obligación de realizar al menos una pernoctación en destino, y de rebajas a jóvenes.
Los billetes convencionales de Iberia en Asturias están por encima de los que presenta su filial regional Air Nostrum para volar de Santander a Madrid. Para los viajes tomados como base, la diferencia en favor de la terminal cántabra de Parayas oscila entre los 50 y los 150 euros. Los precios en La Coruña son similares a los de aquí, aunque ligeramente por debajo en la mayor parte de horarios consultados, mientras que en Vigo, donde opera Iberia Express, también son algo más baratos.
El enlace entre Santiago de Compostela y Madrid, a cargo de Ryanair, ofrece billetes sin promociones especiales que son, de media, unos 150 euros más bajos que los de Iberia en Asturias.
Los precios para volar a Madrid desde Asturias se disparan cuando Iberia realiza la ruta en solitario, como sucede ahora, según vienen denunciando los viajeros, alguno de los cuales ha llegado a pagar más de 500 euros por un billetes de ida y vuelta a la capital de España. Esta circunstancia ha sido clave en el desplome del número de pasajeros en el corredor de Barajas y también en el de Barcelona, de Vueling. Según consta en las estadísticas del gestor Aena, en 2012, cuando Ryanair competía con Iberia y Vueling en las dos grandes rutas desde Asturias, éstas tuvieron 33.000 viajeros más en julio que el mismo mes de este año.
En el caso de Madrid, al efecto disuasivo de los precios de Iberia se le suma la competencia del Alvia, que lleva varios años ganando pasajeros y espera sumar más cuando el AVE llegue a León y se abra la variante de Pajares.
