"El día de Asturias es para mí sagrado venir a ver a la Virgen del Fresno, ella siempre cumple y yo siempre vengo", afirmó Leonor Álvarez, de Oviedo, tras asistir a la misa y procesión en honor a la Virgen del Fresno en el santuario mariano de Grado. No es de extrañar, la imagen de la Virgen genera una gran devoción no sólo entre los vecinos, sino también entre muchos asturianos que acuden al templo a venerar la talla.

Y por eso muchos vecinos de Grado subieron a la ermita como Paz García. "La Virgen del Fresno es nuestra señora, hay tradición pero también mucha devoción y dicen que concede todo lo que se le pide", comentó.