El rector de la Universidad de Oviedo, Vicente Gotor, ha resaltado hoy que de las 35 jubilaciones del profesorado que se han producido en este año, 23 han sido de forma voluntaria, lo que, a su juicio, este inusual número se debe a la inadaptación de los docentes a las exigencias del Plan de Bolonia.

Gotor, que ha informado en rueda de prensa del desarrollo del nuevo curso académico y de los acuerdos adoptados en el Consejo de Gobierno de la institución académica, ha indicado que en 2014 se produjeron 30 jubilaciones, "la mayoría voluntarias", por lo que la Universidad ha podido convocar 15 nuevas plazas del profesorado en el marco de la tasa de deposición que es del 50 por ciento.

La oferta pública de empleo de este año para el personal docente e investigador cuenta con seis plazas para la figura del profesor contratado doctor y otras nueve para el profesorado, con la posibilidad de convocar seis doctorados.

Ha atribuido el "fenómeno" del incremento de las jubilaciones de tipo voluntario a que algunos profesores "les ha costado adaptarse" al Plan de Bolonia, al suponer "mucho esfuerzo".

Ha indicado que cuando se aprobó el Espacio Europeo de Educación Superior, el denominado proceso de Bolonia, "el ex presidente del Principado Vicente Álvarez Areces le prometió la contratación de 120 plazas de profesorado cuando resultaron 120 menos".

Sin este aumento del profesorado, ha subrayado, "no se ha podido reducir los grupos ni hacer las tutorías grupales" como estaba contemplado en el nuevo plan de enseñanza europeo.

Gotor ha reconocido que en este número de jubilaciones voluntarias hay también cuestiones familiares o de salud pero ha recalcado que este alto número de bajas voluntarias "tan elevado no se habían constado hasta los últimos años".

Por otra parte, ha indicado que se han presentado 530 solicitudes de peticiones de personas afectadas por el régimen de permanencia universitaria, de las que noventa han sido rechazadas.

El rector ha calificado de "mentira" las cifras dadas por el Consejo de Estudiantes de la Universidad, que cifran en 1.000 estudiantes los afectados por este medida.

Ha explicado que por norma habitual, incluso antes del Plan de Bolonia, suele haber entre unos doscientos o trescientos alumnos que abandona sus primeros estudios porque no les gustan o no se ven preparados para afrontarlos, lo que, a su juicio, no se pueden señalar como expulsados.

El rector, que ha leído su informe durante el Consejo de Gobierno ha tildado de "desleal" al secretario de la Sección Sindical de CCOO de la Universidad, Ignacio Loy Madera, "al intentar confundir a la comunidad universitaria".

Ha afirmado que no son ciertas la censura realizada por Madera sobre las irregularidades en el inicio de cursos que se ha desarrollado, según ha aseverado, con normalidad.

También le ha reprochado que asegurara que el personal de la Universidad no iba a cobra la paga, cuando lo único que hacía falta era un formalismo que ya está subsanado, según ha explicado.

El rector ha destacado que los estudiantes extranjeros han distinguido a la Universidad de Oviedo, junto a la Carlos III de Madrid, la de Barcelona y la de Sevilla, con la "excelencia" en la la docencia de los másters.