Galaxia Hernández Salguero, la reclusa fallecida el pasado martes en su celda del módulo diez de Villabona (el módulo femenino de la prisión), murió a consecuencia de un infarto agudo de miocardio, según el informe preliminar de la autopsia practicada al cadáver, tal y como señaló ayer el Delegado del Gobierno, Gabino de Lorenzo, durante los actos de la festividad de los Ángeles Custodios, patrones de la Policía.

La joven comenzó a sentirse indispuesta en su celda, en torno a las tres y media de la tarde. Su compañera avisó a los funcionarios, que trataron de reanimarla sin éxito. Era una mujer muy deportista, que entrenaba a boxeo en el recinto penitenciario. Inicialmente, se especuló con que el fallecimiento tuviese que ver con el tratamiento que estaba tomando, según fuentes conocedoras del caso.

La muerte de esta reclusa es la quinta que se registra en la prisión desde el pasado mes de noviembre y la tercera de este año. En noviembre, fallecieron dos reclusos canarios tras la ingesta de un cóctel de fármacos, y actualmente hay abierta una investigación judicial sobre este asunto promovida por la familia de las víctimas. Unos meses después se produjo el fallecimiento de un recluso por sobredosis. El preso acababa de llegar de una cárcel gallega para asistir a un juicio. Poco después se ahorcó un preso gijonés en su celda de la enfermería de la prisión, donde había otros tres reclusos, entre ellos el que tenía asignado a su vigilancia, ya que se le aplicaba el protocolo antisuicidios.

Esta concatenación de fallecimientos ha hecho que la asociación Defensor del Paciente haya dirigido un escrito a la Fiscalía Superior de Justicia de Asturias en el que solicita la apertura de una investigación de oficio sobre las muertes, según Efe. En el escrito, la asociación pide una investigación sobre la situación de la seguridad y del personal que pueda contribuir a que estos hechos no ocurran de forma "tan rutinaria".

Para diversos sectores, como la Asociación de Familiares de la UTE de Villabona, el PSOE, IU, Podemos y otras organizaciones, esta cadena de fallecimientos tiene que ver con el desmantelamiento del modelo de las unidades terapéuticas educativas, un extremo que niegan tanto el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, como el secretario de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste, y el Delegado del Gobierno.