"Era una persona fría, que exhibía una tranquilidad impresionante", aseguró ayer Francisco Gómez, policía municipal de Grandas de Salime que ayer recibió una metopa en agradecimiento por su papel en la detención de Miguel Ángel Muñoz Blas, presunto asesino de la peregrina Denise Pikka Thiem. Gómez fue el que localizó y vigiló discretamente al presunto asesino hasta la llegada de los agentes de la Comisaría de Luarca que practicaron la detención. "Es un honor enorme. Sólo cumplí con mi deber", aseguró este agente.