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Un museo único en crecimiento

A la Facultad de Geología le salen alumnos hasta debajo de las piedras. El grado de la especialidad ha batido este curso su récord de matriculados, con un incremento del cincuenta por ciento con respecto a la media de años pasados, el mayor de la Universidad de Oviedo. Además, decenas de estudiantes marcaron como segunda opción esta carrera a pesar de que sus contenidos se encuentran arrinconados en los estudios de Secundaria y Bachillerato. Los dirigentes del centro académico, que han realizado una encuesta interna para conocer las motivaciones de los jóvenes, vinculan este auge al aumento de la legislación medioambiental, un asunto que se trata en varias asignaturas de la titulación, y al mayor interés que generan los desastres naturales, como terremotos e inundaciones.

"Nosotros somos los primeros sorprendidos por la gran matrícula que hemos tenido este año", señala la decana de la Facultad de Geología, Rosa Ana Menéndez Duarte. "En primer curso, la media hasta ahora rondaba los cuarenta alumnos. Esta vez hemos superado los sesenta y muchos otros mostraron interés por acceder", apunta la profesora, que se hizo cargo de la dirección del centro ubicado en el campus ovetense de Llamaquique hace apenas medio año. "Estas cifras no se conocían desde hace casi dos décadas, cuando el número de universitarios en Asturias era mucho mayor al de ahora", remata.

Menéndez Duarte considera que los estudios geológicos se han puesto de moda por tres factores. Por un lado, vincula este crecimiento a la "mayor visibilidad de los problemas ambientales", cada vez más presentes en la legislación que regula casi cualquier actividad económica y que tienen un amplio seguimiento en la carrera. Además, ha detectado que muchos alumnos están interesados por la obra civil (la Geología es básica en este campo), ante el parón de la construcción y las oportunidades que abre en España y en el extranjero. Por último, opina que las campañas de captación que la Facultad realiza desde hace varios cursos en institutos y colegios asturianos han empezado a dar sus frutos. "Procuramos llegar al mayor número de jóvenes de Bachillerato para dar a conocer los contenidos de nuestra disciplina y estamos encontrando un alto nivel de aceptación a pesar de que, a muchos, les suenan como algo completamente nuevo", añade.

El fuerte incremento de la matrícula en los estudios de Geología contrasta con la situación que atraviesan la mayoría de los títulos, que han mantenido el número de alumnos o experimentan una tendencia a la baja desde que comenzó esta década. Y fortalece a una disciplina que ha perdido peso en la Educación Secundaria con las sucesivas reformas educativas, en detrimento de otras especialidades, como la Biología. Por este motivo, los números han supuesto una inesperada alegría en el centro de Llamaquique.

"Detrás de este gran aumento está el creciente interés que levantan los riesgos y los recursos geológicos vinculados a desastres naturales, como terremotos y otros fenómenos", sostiene Carlos López, director del departamento de la especialidad en la Universidad de Oviedo. "Ni de lejos esperábamos estos números en la matriculación, así que es motivo de satisfacción", añade. "Además, de alguna forma se confirma que nuestra Facultad es de las mejores de España, sino la mejor. Nos llegan alumnos de muchos puntos del país", remata el profesor.

Las impresiones de los docentes coinciden con la versión de buena parte de los alumnos. "Me quiero matricular en Geología porque considero que es fundamental para dominar aspectos ligados al medio ambiente, que a día de hoy te lo piden para casi todo", sostiene Sergio González, alumno gijonés de Segundo de Bachillerato, a las puertas del museo de la Facultad. "La curiosidad por esta especialidad me entró hace poco, después de leer un libro sobre maremotos. Descubrí que es fundamental para muchas actividades", remata el joven.

Además, muchos valoran otros aspectos ligados a la organización y funcionamiento del centro, el que menos alumnos en términos globales tiene de la Universidad al contar sólo con un grupo por curso. "Eso posibilita una proximidad entre profesores y alumnos que no se da en otras facultades y escuelas", relata la decana. Menéndez Duarte. "Se puede decir que casi nos conocemos todos por el nombre, lo que no es algo habitual en la Educación Superior", añade. Otra de las claves que explica el creciente atractivo de la Geología en Asturias.

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