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El tren choca con el autobús

La patronal del transporte por carretera tilda de "predatoria" la política de precios de Renfe tras denunciarla ante Competencia

El tren choca con el autobús

La campaña promocional de precios implantada por Renfe con motivo de la inauguración del AVE de León -que deja hasta diciembre el precio del tren de Asturias a Madrid en 25 euros- ha recrudecido la "guerra" entre la patronal del autobús (Confebús) y la operadora ferroviaria. Las hostilidades ya se desataron hace dos años, tras la decisión del Ministerio de Fomento de incentivar el uso de los trenes de larga distancia con significativas rebajas en los billetes, que llegan, incluso, hasta el 70%. Ahora, con las nuevas ofertas en el corredor de Alta Velocidad de Valladolid a León, lejos de amainar este enfrentamiento se encona cada vez más y entra de lleno en la conexión del Principado con la capital de España.

Los precios "predatorios" de la Alta Velocidad no solo "desincentivan" la liberalización del sector, proceso que acumula un importante retraso, sino que amenazan también líneas de transporte público por carretera, denuncia un informe de Confebús. De acuerdo con los cálculos de la patronal, para cuadrar cuentas, la política tarifaria de Renfe debería haber ido acompañada de un incremento de las tasas del Adif de un 30%. Es más, según este documento, Renfe perdió 63,75 millones de euros en sus servicios comerciales el primer año de aplicación de rebajas, pese a haber sumado 3,25 millones de nuevos viajeros.

En el caso de Asturias, y según ha reconocido la operadora ferroviaria, los descuentos en vigor para viajar a la capital de España le han permitido incrementar en casi un 20% la venta de billetes. La directora general de Renfe, Berta Barrero, aseguró recientemente en un encuentro con periodistas en Madrid, al que asistió LA NUEVA ESPAÑA, que su intención en el corto plazo es superar al avión y al autobús en el reparto modal de los viajes entre Asturias y la capital, con un incremento del 24% hasta llegar al entorno de los 350.000 usuarios al año. En la actualidad, el 62% de los desplazamientos en esta conexión se realizan en vehículo particular, un 15% en los aviones de Iberia, el 12% en los autobuses de Alsa y el 11% en los Alvia de Renfe. El uso del tren tiende al alza por los recortes en los tiempos de viaje logrados con la apertura del AVE de Valladolid a León -de hasta una hora en algunos servicios- y por los que están previstos cuando entre en servicio la variante de Pajares, de entre 45 y 50 minutos.

La agresiva política de precios de Renfe ha tenido una doble respuesta desde la carretera. Alsa creó el pasado verano una promoción para viajar de Asturias a Madrid por 5 euros. Pero, además de hacer frente a la competencia con este tipo de ofertas, la patronal del autobús, de la que forma parte la empresa asturiana, integrada hoy en la británica National Express (NX), ha presentado una denuncia contra Renfe ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. Entiende que la operadora pública hace un abuso de su "posición dominante", que "supone un grave daño a la competencia" y "pone en riesgo miles de empleos, así como el bienestar de consumidores y usuarios". Según Confebús, desde febrero de 2013, Renfe tiene en marcha una política comercial "muy agresiva" que perjudica gravemente al sector del autobús, en el que hay 88.000 empleos directos, una facturación de 3.700 millones y una clientela de 1.200 millones de viajeros al año. Según la patronal, el año en el que se pusieron en marcha las rebajas, Renfe captó 6,25 millones de nuevos viajeros, mientras que las empresas de autobús perdieron 1,4 millones y no han remontado la tendencia a la baja.

Berta Barrero se defiende de las críticas asegurando que los servicios de Renfe que no son "obligación de servicio público", como del AVE y el Alvia, no reciben ningún tipo de ayuda pública.

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