Los diputados y senadores cobrarán una "indemnización" durante los 54 días que discurrirán desde que las Cortes queden disueltas, el 26 de octubre, y se celebren el 20 de diciembre las elecciones generales. Así, los diputados del Congreso seguirán cobrando sus sueldos íntegros hasta la jornada electoral: 2.813,87 euros al mes a los que hay que sumar, en el caso de los asturianos, 1.823 euros. También cobrarán los complementos por cargos en las comisiones.

Además, los diputados puedan quedarse con los teléfonos iPhone de que disponen: en su día la Cámara los recibió gratis cuando firmó el contrato con una operadora. También los diputados podrán quedarse las tabletas iPad si pagan 50 euros, porque ya tienen cuatro años de antigüedad y no están en el mercado.

El sistema de retribuciones es diferente para los senadores, que cobrarán 154,54 euros brutos al día desde la disolución de las Cortes hasta la jornada anterior a las elecciones. Cobrarán también la parte proporcional de las retribuciones del mes de octubre y de la extra de diciembre. Seguirán de alta las líneas de voz y datos de los senadores hasta que, tras las elecciones, se den de baja o cambie la titularidad. También pueden quedarse con el teléfono móvil, ordenador portátil o tableta abonando el valor de amortización. Eso sí, el Senado ya no pagará viajes salvo el que deban hacer a Madrid para los ceses.

Los diputados y senadores que forman parte de las respectivas diputaciones permanentes continuarán cobrando tras las elecciones aunque no resulten electos hasta que se celebre la sesión de investidura. Los que pierdan su escaño aún cobrarán indemnizaciones que pueden llegar a las 24 mensualidades.