La semana de los premios "Princesa de Asturias" arrancó ayer con un auténtico caos en la conexión aérea entre Madrid y el Principado, operada en exclusiva por Iberia, que hasta dificultó la llegada de los primeros galardonados a la región. En concreto, dos vuelos -uno de entrada y otro de salida- fueron desviados a Santander, un tercero regresó a la capital cuando ya estaba completando la maniobra de aterrizaje en Santiago del Monte, y otro servicio en dirección a Barajas fue cancelado a media tarde.
La compañía achacó todas esas incidencias a las "malas condiciones meteorológicas" en la terminal castrillonense, tanto por escasa visibilidad como por viento. Sin embargo, se da la circunstancia de que los únicos aviones que no aterrizaron o despegaron de Santiago del Monte fueron los de Iberia, ya que, al cierre de esta edición, el resto de compañías había operado con normalidad durante toda la jornada, a pesar de la baja visibilidad que se registró durante la mayor parte del día. Algunos aviones de Vueling y de Volotea sí que sumaron retrasos tras haber sobrevolado la región a la espera de que mejorasen las condiciones meteorológicas para tomar tierra. Además, una nave de Vueling procedente de Palma de Mallorca tuvo una demora de 80 minutos por problemas operativos en el aeropuerto de origen.
Fuentes aeroportuarias consultadas por LA NUEVA ESPAÑA aseguran que, además de a la conjunción de viento y escasa visibilidad de ayer, los desvíos y cancelaciones de Iberia en Asturias también responden a la reticencia de sus pilotos a utilizar el sistema de guía para aterrizar con niebla en el aeropuerto. Y ello pese a que se trata del más avanzado del mercado (ILS-III) para tomar tierra con dificultades de visión.
Los primeros problemas del día se presentaron poco después de las ocho de la mañana. El avión de Iberia que tenía prevista su llegada a las 08.37 horas al Principado fue desviado al aeropuerto de Santander, debido a la escasa visibilidad en la cabecera 11 de la terminal asturiana. Sin embargo, muy pocos minutos después de que esa nave de Iberia tomara rumbo a la terminal cántabra de Parayas aterrizaba en Santiago del Monte un avión de Vueling procedente de Barcelona que había estado sobrevolando la región durante veinte minutos a la espera de que las condiciones meteorológicas le permitieran tomar tierra. Lo mismo hicieron, y también con éxito, otros dos aviones, uno de ellos procedente de Málaga y el otro de Valencia
Como consecuencia del desvío del avión de Iberia a Santander, los viajeros del enlace de vuelta a la capital, con salida a las diez menos veinte y que ya habían facturado sus equipajes, fueron informados de que el vuelo partiría directamente desde la terminal cántabra de Parayas, ya que el avión desviado no iba a desplazase a Asturias para recogerles. La compañía fletó un autobús para transportar al pasaje, pero muchos pasajeros rehusaron hacer por carretera ese viaje de dos horas de duración para viajar luego a Madrid.
Las incidencias en Santiago del Monte continuaron por la tarde. El avión que tenía la llegada prevista a Asturias a las cinco abortó la operación de aterrizaje cuando ya estaba cerca de la pista, según varios pasajeros que se encontraban a esa hora en la terminal. Justamente en esa nave que regresó a la capital de España viajaba el presidente de la Fundación Wikimedia, Patricio Lorente, que se desplazaba a Oviedo para recibir el galardón de Cooperación Internacional, concedido por la Fundación Princesa de Asturias a Wikipedia.
