La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El obispo de Astorga, sobre el ecónomo del otro "Vatileaks": "Le conocía, no diré nada"

Los prelados de la provincia eclesiástica analizan en Covadonga la vida consagrada

En el centro, Camilo Lorenzo, junto al arzobispo de Oviedo, Sanz Montes, segundo por la derecha. C. C.

El obispo de Astorga, Camilo Lorenzo Iglesias, declinó ayer en Covadonga pronunciarse acerca de los robos y filtraciones de documentos secretos vaticanos presuntamente cometidos por el execónomo de su diócesis, el prelado Lucio Ángel Vallejo. "Lo conocía pero creo que no viene al caso comentar nada", afirmó cariacontecido a su salida del Museo de Covadonga, lugar que acoge hasta mañana un Encuentro de Obispos, Vicarios y Arciprestes de la Provincia Eclesiástica de Oviedo, que incluye la diócesis de Astorga así como las de Santander y León.

Vallejo, que hasta hace cuatro años fue ecónomo de la diócesis de Astorga, resultó detenido el lunes por divulgar supuestamente material clasificado, un delito penado por la legislación vaticana. Concretamente habría conseguido documentos sobre las revisiones contables o la reorganización en curso de la Curia romana. El próximo lunes se publicarán dos libros basados en los papeles sustraídos por este sacerdote riojano y por la laica italiana Francesca Chaouqui. El Vaticano revive así los tiempos del "Vatileaks", escándalo que estalló en 2012 después de que el mayordomo del Papa Benedicto XVI, Paolo Gabriele, divulgara parte de la correspondencia de este.

En el encuentro de ayer, que tuvo como tema principal la vida consagrada y estuvo presentado por el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, nadie quería pronunciarse al respecto del prelado riojano. La reunión contó con la presencia de Lourdes Grosso, directora del Secretariado de la Comisión Episcopal, que impartió la charla "La vida Consagrada en la Iglesia de la Comunión", en la que hizo una llamada a la unidad y a "vivir en comunión para ser santos, dando a conocer la Buena Noticia". En el encuentro se puso en valor la labor desempeñada por religiosas y frailes. De lo más reseñable de la jornada fue la participación, entre otros, de delegados para la vida consagrada de cada diócesis, que en el caso de Oviedo recayó en la figura de Manuel Ángel Acebal. El obispo de Santander, Manuel Sánchez, no llegó hasta por la tarde.

Más información en pág. 64

Compartir el artículo

stats