El PSOE asturiano ya pasa factura al pacto PP-Foro y muy especialmente a las acusaciones Francisco Álvarez-Cascos de sobre la existencia de un "pacto del duernu" entre populares y socialistas cuando regresó a la política asturiana. Javier Fernández, secretario de la FSA echó ayer en cara "cuatro años de violencia verbal, de matonismo político, de garrulería oral, estirando la simplificación hasta el límite para engañar hasta el límite. Cuatro años con Álvarez-Cascos plantado frente al PP como el Clint Eastwood de Sin Perdón". El presidente del Principado lanzó ese mensaje durante su intervención en el homenaje que los socialistas llaniscos brindaron ayer al exsecretario del PSOE y exministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.

La campaña electoral está a la vuelta de la esquina y de las palabras de Javier Fernández cabe deducir que el reproche al recién firmado pacto entre foristas y populares será un argumento de referencia en los discursos socialistas en Asturias. "Ellos no se interpelaban como políticos o ciudadanos si no como hooligans. Cuatro años en que la política era como la guerra y los adversarios como enemigos. Cuatros años así y de pronto nada, pelillos a la mar y han pactado unas listas conjuntas (...) Aunque para ellos todo está olvidado con una amnesia radical, como si se hubieran hecho una lobotomía voluntaria, os aseguro que nosotros vamos a recordar por ellos", advirtió un Javier Fernández con tono serio. "Yo podría decir que esto es como el padre pródigo que regresa por Navidad o la alumna que abre al viejo maestro la puerta de la casa común, pero no se pueden hacer chanzas. Esto es grave porque la corrupción de las palabras es incompatible con la regeneración política y aquí las palabras se han corrompido por dentro y por fuera. La derecha asturiana, las dos, después de haber mentido tan deliberadamente no les queda más remedio y no tienen vergüenza porque la vergüenza debe ser proporcional el respeto por la verdad y la inteligencia de la gente que nos escucha", recalcó el secretario general de la FSA que al inicio de su discurso recordó la esencia de los mensajes casquistas de los últimos cuatro años y su especial inquina sus antiguos compañeros del PP: "Cascos hablaba como Artur Mas. Más habla de una nación oprimida y él de una país olvidado y como Mas tenía un adversario exterior y un quinta columnista interior. Para Cascos, Rajoy era el adversario de Asturias, Montoro era un mentiroso compulsivo, Ana Pastor prostituía la Variante, Soria enterraba las Cuencas y yo era el conde Don Julián que, resignado, abría las puertas a estos nuevos algareros", subrayó Javier Fernández en un acto en el que el alcalde de Villaviciosa, Alejandro Vega, se sumó a las críticas a la nueva coalición electoral de la derecha. "De la prostitución de las ideas y de la palabra tenemos un ejemplo lamentable en Asturias", manifestó Vega, quien recogió el galardón que le entregó la presidenta de la Agrupación Socialista de Llanes, la diputada autonómica Dolores Álvarez Campillo, "por conseguir que Villaviciosa sea socialista. Esperamos que en las generales el PSOE vuelva a ganar en Llanes y sea el preámbulo para recuperar la Alcaldía, ahora nos toca trabajar en la oposición".