Pasaban apenas unos minutos de las doce del mediodía cuando el Presidente de la Conferencia Episcopal Española, Monseñor Ricardo Blázquez, interrumpía el plenario para anunciar a todos los obispos presentes que el hasta ahora obispo auxiliar de Oviedo, Juan Antonio Menéndez Fernández (Villamarín de Salcedo, Grado, 1957) había sido nombrado por el Papa Francisco nuevo obispo de Astorga, en sustitución de Camilo Lorenzo Iglesias, que en agosto pasado había renunciado al cargo ante la Santa Sede por razones de salud.

Juan Antonio Menéndez, que tomará posesión el próximo 19 de diciembre, reconocía saber la noticia desde hacía "unos quince días", tenía sentimientos encontrados. "Por una parte me da un poco de pena y nostalgia de Asturias porque será la primera vez que me vaya por un tiempo prolongado porque toda mi vida personal y eclesial se ha desarrollado en Asturias, donde nací", pero "por otro lado, tengo ilusión, mucha ilusión de ir a una diócesis de las más antiguas de España, se creó en el siglo III, y de la que yo hago el obispo número 137 de la misma". El nuevo obispo de Astorga consideraba además que la diócesis de la que se hará cargo, que es sufragánea de la archidiócesis de Oviedo, "tiene ciertas similitudes con el Principado porque tiene una parte rural y otra industrial y minera en la zona de Ponferrada por lo que no me va a resultar extraña".

Monseñor Menéndez Fernández, que ejercía como obispo auxiliar de Oviedo desde 2013, explicaba que "todo el mundo me dice que la gente, los sacerdotes de la diócesis astorgana son muy cariñosos, muy cercanos al obispo. Espero que me acepten y humildemente iré a aprender, como buen discípulo, en cuestiones pastorales, diocesales, tradiciones...". Y es que el nuevo obispo de Astorga, en una carta de saludo que ya ha enviado a su nueva diócesis, y tras agradecer al Papa Francisco "la confianza que deposita en mi persona al encomendarme pastorear esa iglesia particular de tan dilatada tradición cristiana que se mantuvo en comunión con el sucesor de Pedro y dio muchos frutos de santidad", ha dicho a los sacerdotes de Astorga que quisiera ser no sólo vuestro hermano en el sacerdocio sino también vuestro amigo y compañero".

En la misiva, Juan Antonio Menéndez ha explicado a los sacerdotes que "juntos debemos empeñarnos en acompañar al pueblo fiel y pedir al Señor que suscite vocaciones al ministerio sacerdotal para que nunca falten en la Iglesia servidores la Palabra y de los Misterios de Cristo". Igualmente ha dirigido unas palabras "con especial afecto" a todos los fieles laicos, especialmente a las familias, a los jóvenes y a los enfermos. "Soy consciente de la importancia que tiene vuestra labor evangelizadora para trasmitir la fe a las futuras generaciones y para transformar todas las realidades del mundo según los planes de Dios. Contad con mi oración y apoyo", concluye. Sobre el "cambio de época", y lo acontecimientos recientes "que acabamos de vivir" Monseñor Menéndez Fernández remarcó que han supuesto "un auténtico terremoto" donde se hace necesario "evitar los choques entre culturas, entre los pueblos y que encontremos conjuntamente los caminos que conduzcan a la paz y al progreso". La diócesis de Astorga a la que se incorpora Menéndez abarca comarcas de tres provincias diferentes, León, Orense y Zamora, y tiene unos 280.00 habitantes y alrededor de 1.000 núcleos de población, muchos de ellos pequeñas aldeas de apenas un puñado de habitantes. La sede diocesal está situada en la catedral de Santa María de Astorga.