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Ni faro ni mar en Oviñana

Varios turistas recalan, guiados por el GPS, en el pueblo de Belmonte que comparte nombre con la localidad cudillerense donde se halla el Cabo Vidio

Mari Carmen Cotarelo señala el lugar donde se detienen los turistas al llegar a Oviñana. ANA PAZ PAREDES

Cuando Mari Carmen Cotalero y su marido, José Manuel Menéndez Álvarez, están de tertulia, tras la comida, en la terraza de su casa en Oviñana (Belmonte de Miranda), y ven llegar un coche que no es de ningún residente del pueblo, ya saben sin levantarse del asiento que se trata de unos turistas perdidos. "Ahora pasa menos, pero durante el verano y en Semana Santa raro es no ver por aquí un coche cada dos por tres con viajeros que están buscando el faro o las vistas del mar de Cabo Vidio", recuerda Mari Carmen. Añade, no sin cierta ironía, que "aquí llega tanta gente preguntando por el faro que el día menos pensado compro yo uno y lo planto aquí delante". Y es que todas las semanas, sobre todo en época vacacional, aparece frente a su casa algún coche con gente preguntando por el pueblo del concejo de Cudillero.

En la gran mayoría de los casos el culpable es el GPS: "Si sólo metes la palabra Oviñana, el primero que te sale es nuestro pueblo en el concejo de Belmonte de Miranda, pues el aparato va por orden alfabético. Si la gente escribe Oviñana y también la palabra Cudillero, entonces sí les lleva hasta donde quieren llegar", matiza José Manuel Menéndez Álvarez, que estos días andaba enzarzado haciendo sidra en el llagar de su casa, en el pueblo belmontino.

Otros llevan copias de Google Maps o viajan siguiendo la información que sale en su tablet. Así lo recuerda otro vecino de Oviñana, el más joven, Borja Uría. En más de una ocasión tuvo que informar a algunos viajeros que tras hacer parada y comer o tomar un café en el restaurante que regenta su madre, en Puente San Martín, en la carretera a Oviñana, terminaban preguntando por algún lugar concreto del pueblo de Cudillero.

"Recuerdo a una pareja joven que, después de comer y de un buen rato mirando la tablet, me preguntó también dónde estaba el faro. Aquí no hay ningún faro, les dije, estáis en Belmonte, al interior. Estáis a unos veinte minutos de la autopista para coger la dirección a Soto del Barco y desde allí seguir hasta Oviñana, en Cudillero. Curiosamente, me contestaron que, ya que estaban aquí, iban a conocer algo del concejo y también me preguntaron por lugares que ver en Somiedo", señala.

Este joven y el resto de vecinos creen que con esta confusión no hay mal que por bien no venga, pues de paso Belmonte se da a conocer a un turismo que buscaba otro destino. Otro vecino recuerda que "lo del GPS no vale para todo". "Está bien tenerlo, pero es conveniente llevar siempre un mapa del lugar al que viajas actualizado, de los de toda la vida, no una copia sacada de internet, para contrastar la información en caso de dudas. Ahí está el caso, por ejemplo, de un camionero polaco que acabó en el pueblo de Alava, en Salas, cuando en realidad a donde iba era a Álava, en Vitoria", explica.

Una experiencia similar experimentan aquellos viajeros que, a la búsqueda del faro, quedan a medio camino de las estrechas calles de Oviñana, donde llega un momento en que si se continúa hacia arriba resulta complicado dar la vuelta. "Algún que otro coche se ha quedado atascado, pero al final todo se soluciona. Recuerdo a unos italianos que a las dos de la mañana estaban pueblo arriba, pueblo abajo, buscando el faro, y también a unos chavales que andaban buscando la fiesta de Ranón", explica Mari Carmen Cotarelo. "Nosotros les indicamos por dónde pueden ir a Oviñana, en Cudillero, pero también les recomendamos qué ver y dónde comer en nuestra tierra. No tendremos faro, pero tenemos un pueblín bien guapo, un concejo que es lo más y donde se come de cine", sentencia esta vecina del otro Oviñana, el de Belmonte de Miranda.

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