El Juzgado de lo penal número 3 de Oviedo ha condenado a penas que suman más de trece años de cárcel y multas por importe de unos 720.000 euros a cinco de los seis empresarios recientemente juzgados por fraude fiscal y de facturas. Los propietarios de la empresa Hierros J. Pombo, dos hermanos de nacionalidad portuguesa, minoraron los ingresos recibidos en el ejercicio de 2007 mediante la emisión de facturas por servicios no realizados por parte de un transportista y una empresa avilesina de informática y albañilería. En el banquillo también se sentó el propietario de una gasolinera de Tineo, pero la magistrada María Paz González-Tascón le absuelve en aplicación del principio "in dubio pro reo" (ausencia de pruebas claras).
Respecto a la facturación del transportista C. P. C. (defendido por Francisco Pérez Platas), la juez considera que "claramente responde a una mera falacia urdida por ambas partes". C. P. C. declaró que había cobrado 230.000 de la Hierros J. Pombo por llevar a obras fuera de Asturias gasoil y material de obra. "Carece de toda lógica la razón misma de la supuesta contratación", sentencia la magistrada.
Los gerentes de la empresa avilesina (P. J. A. y M. Á. Á.) declararon haber facturado otros 250.000 euros a Hierros Pombo, por intermediación en la contratación de trabajadores, pero la juez estima que "resulta contrario a la máxima de obtención del mayor margen de beneficio".
