El Ministerio de Fomento prevé renovar este año la concesión de la línea de autobús entre la región y Madrid, operada en exclusiva desde julio de 1964 por la compañía asturiana Alsa, integrada hoy en el grupo británico National Express (NX). La concesión caducó en agosto de 2013 y Globalia, grupo empresarial propiedad del salmantino Juan José Hidalgo, ya ha anunciado que también pujará por hacerse con la concesión.
Joaquín del Moral, director general de Transporte Terrestre del Ministerio de Fomento, confirmó ayer en Oviedo, durante el acto de celebración del viajero número dos millones del Alsa "Supra" Asturias-Madrid, que, si no hay complicaciones, esta concesión saldrá a concurso a lo largo del presente año. Según explicó Del Moral, Fomento ya ha renovado 25 de sus 86 concesiones de autobús y las que todavía están pendientes irán saliendo a licitación hasta 2017 "por orden de caducidad".
La concesión de la línea de autobús supondrá una batalla más de la guerra empresarial que mantienen Alsa y Globalia, después de haber peleado por los viajes del Imserso o por el convenio de promoción turística del Principado en aerolíneas, entre otros contratos.
Además de la línea Asturias-Madrid, el Ministerio de Fomento tiene pendiente de renovar la concesión de la ruta de autobús de Gijón a Sevilla, por la que también ha mostrado interés Globalia.
Según indicó ayer Jacobo Cosmen, presidente de Alsa en Asturias, esta compañía emplea en la actualidad a más de 900 personas en la región. En torno al 80% de la plantilla tiene contrato indefinido.
