La hemeroteca nos recuerda que la derecha española siempre ha sabido jugar bien sus cartas, por lo que en esta ocasión no iba a ser menos.

Muy sutilmente, depositaron un caramelo encima de la mesa, y el PSOE, sin pestañear, se lo llevó en su mano. Pero en esta vida nada es gratis, por lo que muy pronto llegará la hora de pagar tamaño y desprendido gesto. Mañana se despertará del sueño para darse cuenta que tan preciado caramelo se ha transformado en una pesada patata caliente, y donde existía la posibilidad de un pacto progresista, ahora tan sólo queda la de un Gobierno de salvación nacional encabezado por el PP. O eso, o nuevas elecciones es lo que hay.