La basura también es un indicador económico. En los años de crisis, las cifras de reciclaje en Asturias cayeron por el descenso del consumo. Pero el pasado año se quebró la tendencia y los asturianos batieron récord: 45,97 kilos de basura al año y por persona fueron convenientemente separados en 2015, según los últimos datos del Consorcio para la Gestión de Residuos de Asturias (Cogersa).

La compañía que gestiona los residuos en el Principado indica que la recogida separada de envases, vidrio y cartón aumentó un 5,05% en 2015. El mayor incremento, de un 5,56%, lo registró el contenedor amarillo, que acumuló 9,87 kilos per cápita en la última campaña. Se trata de la cifra más alta alcanzada en Asturias desde que se puso en marcha el servicio y que acaba con el descenso iniciado en 2011 a consecuencia de la crisis económica y un menor consumo de familias y empresas. Este cambio de tendencia se repite en el caso de los envases de vidrio, que se equiparan con el dato histórico más alto registrado hasta el momento: los 14,78 kilos por habitante que hubo en 2011.

En términos absolutos, los asturianos separaron en sus hogares y centros de trabajo 48.811.579 kilos de residuos, que depositaron el año pasado en los 13.386 contenedores azules, amarillos y verdes que Cogersa gestiona en cooperación con los ayuntamientos, así como en los cubos del sistema puerta a puerta que funciona en la zona urbana del municipio de Oviedo. Cada asturiano aportó al año una media de 21,32 kilos por habitante, otros 9,87 de envases ligeros (briks, latas, botes y botellas de plástico) y 14,78 más de botes y botellas de vidrio. En todo ellos hubo un aumento con respecto a la campaña anterior: un 5,56% en el contenedor amarillo, un 5,57 en el azul y un 3,99 en el verde. La evaluación de los resultados de los últimos diez años demuestra que la recogida separada aumentó casi un 18%, al pasar de los 39 kilogramos por habitante que se registraron en 2006 a los 45,97 actuales.

Pero para poder reciclar más, tiene que haber más contenedores. Cogersa aumentó en 2015 el número de cubos instalados en la región. La cifra total de depósitos llega en Asturias a 13.386: un contenedor azul por cada 170 habitantes, uno amarillo por cada 212 vecinos y uno verde también por cada 2.012 personas.