El PP asturiano alertó ayer de que Asturias no puede permitirse "el constante aumento" de la factura del salario social, que ya asciende a más de 101 millones de euros, y que se ha multiplicado por diez desde su puesta en marcha hace una década. El diputado regional Matías Rodríguez Feito puso la gestión de la renta básica (casi 500 euros de media por beneficiario al mes) como ejemplo de "la gestión ineficiente" del Gobierno socialista en materia de políticas sociales. "Nadie va a ponerse a trabajar si se lo llevan gratis a casa", valoró el parlamentario popular.

El informe elaborado por la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales 2015, cuyo contenido avanzó LA NUEVA ESPAÑA y que sitúa a Asturias entre las autonomías que más gasto social realiza, sobre todo en rentas básicas, pero con una nota por debajo de la medio nacional en varios indicadores, sirvió al PP para realizar un balance negativo de la gestión llevada a cabo por el Gobierno regional y por la consejera de Servicios Sociales, Pilar Varela.

El diputado popular Matías Rodríguez Feito reclamó la revisión de los expedientes del salario social tras advertir de los bajos índices de los beneficiarios que encuentran un trabajo y salen de la lista de perceptores. "No se puede fomentar la inactividad de los beneficiarios", planteó Rodríguez Feito. "El salario social urge una revisión, no nos podemos permitir el constante aumento de esta partida, porque mengua los recursos para otras necesidades como la ley de dependencia o la tele asistencia", afirmó el diputado del PP, categórico en sus manifestaciones. La factura del salario social se multiplica: ha pasado de 10,5 millones de euros en su primera anualidad de 2006 a los más de 101 millones del ejercicio de 2015, recién finalizado y todavía pendiente de contabilidad definitiva.

"Salario social, sí pero no así", resumió el parlamentario popular, más que crítico con el enfoque que, a su juicio, ha dado el Gobierno regional a esta ayuda, concebida como la última cobertura de la que disponen los asturianos para no caer en la exclusión. Para Rodríguez Feito, el salario social debe ser utilizado "como una herramienta de inclusión y no sólo de protección a los excluidos". El diputado también dejó entrever una intención de "fidelizar el voto" de los miles de asturianos que reciben esa ayuda por parte del Ejecutivo socialista. En total, el número de titulares supera los 18.000 aunque la cifra de beneficiarios es mucho mayor y va camino de los 40.000, según las cifras oficiales.Al cierre de noviembre de 2015, el cómputo de la nómina de los once meses ya estaba por encima de los 93 millones de euros para un período en el que se habían registrado 6.061 nuevas altas y 1.697 bajas.

La consejera de Servicios y Derechos Sociales, Pilar Varela, reconoció en septiembre pasado la necesidad de reformar el reglamento del salario social, en una entrevista publicada en este periódico. "Tenemos que modificar el reglamento para evitar que los beneficiarios se vean en la situación de que no les interesa un trabajo de unos meses porque luego se va a tardar mucho tiempo en volver a reconocer la prestación del salario social. Con el actual reglamento estamos desmotivando el empleo y no puede ser", admitió Varela.

La ley regional del salario social se empezó a aplicar en 2006, tras un acuerdo político entre el PSOE e IU, fuerza que se convirtió en la gran valedora de que Asturias fuera una de las primeras comunidades autónomas, tras el País Vasco y Navarra que garantizara el derecho a una renta básica a las personas que no tienen otras prestaciones.