El 25% de los asturianos son fumadores diarios, según el estudio. La mayoría son hombres (un 27,5%). En la población juvenil, la cifra es del 10%. Pese a estos datos, el consumo ha descendido de 2008 a 2012 de forma notable. Los hombres son los que más dejan el cigarrillo aparcado, justo al revés que en la población estudiantil, donde es en ellas en las que se registra un mayor descenso. Además, cerca del 97% de las personas no están expuestas nunca o casi nunca al humo en lugares de trabajo.