El cadáver de un oso pardo adulto fue encontrado el sábado en avanzado estado de descomposición cerca del pueblo de Faedo, en Quirós. La voz de alarma la dio un excursionista, que avisó del hallazgo a la Fundación Oso de Asturias. El Principado activó el protocolo previsto para casos de mortalidad de fauna salvaje y varios guardas recoger los restos del animal. Según aseguran fuentes de la consejería de Recursos Naturales, el plantígrado llevaba muerto al menos un mes, por lo que se desconocen las causas. El Gobierno regional realizará esta semana la necropsia.

El Fondo Asturiano para la Protección de Animales Salvajes (Fapas) denuncia por su parte que "no es la primera vez que la recogida de restos de osos terminan bajo procedimientos irregulares". Con estas palabras, el presidente, Roberto Hartsánchez se refiere a que en muchos casos "no hay autorizaciones judiciales ni actas de custodia para la realización de necropsias".