Cinco pollos de quebrantahuesos han nacido en estos últimos días en el Centro de Cría en Aislamiento Humano (CRIAH) ubicado en Pastriz (Zaragoza), quien tiene concertada su gestión con la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos y para la recuperación de esta especie en los Picos de Europa.

Los cinco ejemplares proceden de siete huevos rescatados de nidos situados en el Pirineo aragonés -dos de ellos infértiles- para los que los datos disponibles apuntaban un alto riesgo de fracaso reproductor en condiciones naturales, y las eclosiones se han producido entre el de febrero y el 14 de marzo.

Según ha informado el Gobierno de Aragón, el rescate de los huevos, que llevó a cabo un equipo especializado de Agentes para la Protección de la Naturaleza del Gobierno de Aragón, y la cría en cautividad de los pollos forman parte de las acciones incluidas en el proyecto europeo LIFE+ 'Red Quebrantahuesos' 2013-2018.

De estos nuevos nacimientos, el Gobierno de Aragón ha destacado el de un pollo procedente de un huevo extremadamente pequeño, que con toda seguridad no habría llegado a eclosionar en el medio natural o hubiese muerto al poco de nacer y que, gracias a la asistencia durante la eclosión y a los cuidados posteriores de los técnicos de la fundación, pesa ya más de medio kilogramo con solo 25 días de vida cuando al nacer no alcanzaba los 100 gramos.

Por otro lado, se ha conseguido la eclosión de un huevo procedente de una pareja que, por los datos disponibles, llevaba 25 años sin lograr reproducirse en el medio natural y, por tanto, sin aportar descendencia a la población.

En el CRIAH, estos quebrantahuesos, cedidos por el Gobierno de Aragón para su liberación en Picos de Europa en el marco del citado proyecto LIFE+, son criados en aislamiento humano mediante señuelos naturalizados y comportamiento inducido por impronta natural, capacitándolos así para su posterior vida en libertad.

Una vez los pollos adquieran un desarrollo adecuado serán trasladados a unas estructuras que simulan nidos, instalados en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido para conseguir su aclimatación en presencia de quebrantahuesos en libertad durante un periodo de dos meses.

Este proceso se conoce como 'hacking' o crianza campestre, y continuará en el Parque Nacional de Picos de Europa, a donde serán trasladados con unos 90 días de vida y permanecerán en otra plataforma adaptativa hasta su liberación definitiva, pasando así a formar parte del "stock" silvestre de la especie.

Esta técnica de cría utilizada con el quebrantahuesos está adaptada de los protocolos de cría del cóndor de california y del cóndor andino.

El proyecto LIFE+ 'Red Quebrantahuesos' se implementará hasta el año 2018 con la previsión de liberar entre 3 y 6 ejemplares de la especie al año en Picos de Europa.

El objetivo del proyecto es la creación en la Cordillera Cantábrica de un nuevo núcleo poblacional de esta especie catalogada como "en peligro de extinción", colaborando con ello a la recuperación global de la especie en España y la Unión Europea.

Se pretende el asentamiento estable de la especie en el área, posibilitando así el mantenimiento de una metapoblación que favorezca un flujo e intercambio continuado de ejemplares, a través del corredor ibérico-cantábrico, con la población pirenaica.

También se persigue ampliar su área de distribución y contribuir a la disminución del riesgo de extinción de la especie, que mantiene concentrada en la cordillera pirenaica la única población silvestre de Europa y que supone el 85 % de la población mundial.

El programa es desarrollado por la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos y cuenta con la financiación de la Unión Europea, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y los gobiernos de Aragón, Asturias y Castilla y León.