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El Gobierno propone cinco grandes parques para el área central

El proyecto para el eje metropolitano pretende alejar las zonas rurales de las "tensiones urbanísticas especulativas"

El Picu Fario, en cuyo entorno se plantea uno de los cinco parques periurbanos de la zona central. ÁNGEL GONZÁLEZ

El plan para la ordenación del área central de Asturias que ha presentado el Gobierno regional incluye la creación de cinco grandes parques periurbanos en zonas con valor paisajístico o natural, ubicadas en las inmediaciones de las ciudades y para las que se proponen usos públicos de esparcimiento. En concreto, estos espacios se plantean para las Cuencas, la zona del Naranco-Nora (entorno de Oviedo y Siero), Gorfolí (comarca de Avilés), Areo (entre Gijón y Carreño) y Deva-Fario (Gijón, Sariego y Villaviciosa).

Junto a los cinco parques periurbanos, esta futura red metropolitana de espacios verdes se completa con las denominadas "microreservas", áreas de dimensiones más reducidas, con hábitats raros, amenazados o infrecuentes. Todas ellas, parques y microreservas, estarían interconectadas entre sí a través de una serie de "corredores fluviales" definidos por los ríos Nalón, Lena, Aller, Caudal, Nora y Noreña. El Nalón, desde su nacimiento hasta la desembocadura, desempeña una "posición preeminente en la red".

Los nuevos espacios verdes del área central se conciben como "cinturones" entre los grandes complejos urbanos y los abundantes núcleos rurales que vertebran buena parte del eje metropolitano y que, para los redactores del plan, no pueden convertirse en áreas residenciales suburbanas de baja intensidad. La propuesta para adaptar los pueblos a la nueva realidad territorial pasa por concentrar el uso residencial en su interior, asignando para ello la capacidad edificatoria que sea necesaria, y por dar prevalencia a la rehabilitación frente a las nuevas construcciones. De igual manera, aboga por la protección de la arquitectura tradicional y por priorizar las inversiones en núcleos que sean dinámicos. De esta forma sería posible garantizar una prestación de servicios similar a la de las zonas urbanas y lograr que el medio rural quede "al margen de tensiones urbanísticas especulativas", evitando en la medida de lo posible actividades que no estén relacionadas con la actividad tradicional agraria y ganadera.

Agricultura ecológica

Las directrices del área central que ha presentado el Gobierno del Principado incluyen la protección de aquellos suelos que, como sucede con las vegas de los ríos, tienen un mayor potencial de aprovechamiento agrario, Además, facilitan la instalación de actividades agroalimentarias, ecológicas y de comercio de proximidad en los núcleos rurales.

La propuesta principal que se desprende de todo el plan es la contención de la tendencia a la urbanización difusa en el eje metropolitano, fomentando un crecimiento hacia dentro de los núcleos poblados y preservando los espacios rurales con iniciativas que permitan su dignificación. Tomada como una única ciudad con tres grandes polos urbanos, el área central presenta el mayor índice de dispersión de todas las urbes y conurbaciones españolas de más de 170.000 habitantes. Se trata de un fenómeno que amenaza con generar problemas medioambientales, económicos y sociales, así como la generalización del vehículo particular en detrimento del transporte público, cuya potenciación es uno de los pilares del plan de ordenación del eje metropolitano.

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