El Partido Popular atenuó ayer la contundencia de la crítica y el tono de sus reproches al mecanismo que el Gobierno del Principado ha elegido para gestionar lo que quiere que sea el área metropolitana central de Asturias. La presidenta del PP asturiano, Mercedes Fernández, lamentó la "merma de competencias" que el proyecto del Ejecutivo autonómico reserva para los 29 municipios concernidos, pero sostuvo la tesis sin llegar a la vehemencia que el diputado Luis Venta utilizó la semana pasada para rechazar la pretensión de instituir por encima de los ayuntamientos lo que identificó como una "minidiputación"o "un gobierno paralelo de Asturias".

El sistema de gestión mediante consorcio metropolitano que abraza el plan del área central, con su poder ejecutivo para tomar decisiones en muy diversas materias, sigue disgustando a los populares, sobre todo porque despoja a los ayuntamientos, precisa Fernández, de "algo muy preciado para ellos, como es el diseño de sus ciudades conforme a las normativas urbanísticas que los plenos municipales aprueban en uso de su autogobierno". "Sus competencias aparecen mermadas en el documento de avance", apostilla.

La líder del PP regional armó ayer un frente común impartiendo doctrina en una reunión con portavoces municipales y presidentes de juntas locales del partido en los concejos afectados, en los que el PP no gobierna ninguno. En Lugo de Llanera para fijar posición, Mercedes Fernández censuró la forma además del fondo y reprobó la gestación anómala del plan. El documento "nació mal", asegura, "y cuando las cosas nacen mal suelen morir rápido". Lamenta la presidenta del PP asturiano que haya habido "un número significativo de municipios", con referencia expresa a Gijón, que "desconocían la existencia del documento" y puntualiza que "si tenía vocación de ser aceptado de forma unánime, o al menos mayoritaria, tendría que haber nacido de otra forma. Se gestó con mucha parcialidad, de un modo equivocado", concluye, y "cuando un proyecto es importante se le da rango y se presenta adecuadamente".

Aun así, pese a los malos augurios que en su versión preceden al proyecto, Fernández asumió ayer en Llanera "el empeño de estudiarlo" y de mirar más allá "de la descripción de las cuestiones que hay que solucionar y que aparecen perfectamente descritas en el documento, de la contaminación al déficit hospitalario en buen número de municipios, al tratamiento de residuos o a los proyectos de suelo industrial que hay que regenerar, reutilizar y redimensionar".