La escritora ovetense Mónica Rodríguez acercó ayer a los más pequeños de la región el drama de la emigración con su novela "Alma y la isla". En ella relata la relación de Alma, una niña etíope acogida por una familia de pescadores de Lampedusa, y Otto, el más pequeño de los niños de la casa. El relato ganó el Premio de Literatura Infantil y Juvenil de la Editorial Anaya 2015, cuyo galardón recogió ayer de manos del rector de la Universidad de Oviedo, Vicente Gotor. Rodríguez (en la foto) definió a la emigración como un fenómeno "muy duro, complejo, de difícil solución, que lo tenemos todos los días muy cerca".