Soplan aires electorales en el Parlamento asturiano. En realidad, la Junta General vive en campaña permanente desde hace más de diez meses pero el riesgo de repetir las elecciones ha avivado la batalla dialéctica entre el Gobierno socialista y buena parte de la oposición, como se pudo contemplar en el turno de Preguntas del Presidente de ayer. Reproches a los pactos entre Pedro Sánchez y Albert Rivera en Madrid o al del ayuntamiento de Gijón, críticas a Podemos por su valoración crítica sobre la Variante de Pajares, y alusiones del PP al "caso Marea" que para los socialistas fueron como mentar "la soga en casa del ahorcado" el día de la renuncia del Ministro José Manuel Soria. Todo ello salió a colación a lo largo del careo quincenal entre Javier Fernández y la oposición.
Mercedes Fernández trató de sacar una sonrisa a la Cámara cuando, de entrada, largó la queja de que Javier Fernández siempre llega "cansado y de malos humos" a la pregunta del PP, que suele ser al final del vis a vis múltiple del Presidente con el resto de portavoces. El mandatario socialista sonrió, como gran parte de la Cámara, pero el buen rollo tenía los minutos contados. Fue mentar la presidenta popular al "incumplidor consejero", en alusión al titular de Educación, Genaro Alonso, y responder raudo el Presidente, con la carga de profundidad de que el diputado David González Medina había frivolizado con los muertos de la Guerra Civil, cuando días atrás se refirió a ese conflicto como "batallitas de hace 80 años". El Presidente, sentido y sensibilizado, afeó la alusión del parlamentario popular "cuando hay mucha gente en las cunetas". El fragor entre Mercedes Fernández y Javier Fernández alcanzó cotas mayores cuando la popular reprochó el dinero que se defraudó al Principado en la etapa del consejero Riopedre mientras cientos de centros educativos requieren mejoras. "Y eso no se llama trabuco, se llama Marea", espetó la dirigente popular, a la que Javier Fernández recomendó "mesura, para no tensar la cuerda en casa del ahorcado". Y una última punzada del Presidente: "Lo básico es sumar, pero bien: no sumar vivos y muertos, como hacen ustedes para ganar congresos", le espetó al PP.
El portavoz de Podemos, Emilio León, arrancó de Fernández el mayor apoyo oído al Presidente sobre al acuerdo Sánchez-Rivera. León reprochó al "partido del puño y la rosa" el entendimiento con el partido de Garicano a lo que Fernández replicó con la presencia del economista en el partido naranja cuando León pidió el apoyo de Ciudadanos y Foro en Asturias "saliéndose de corsés ideológicos". Con Gaspar Llamazares, el intercambio trató del déficit. El portavoz de la coalición echó de menos un frente común con el resto del arco parlamentario y con otras autonomías frente a Montoro y advirtió a Fernández que "no basta con la concertación social para fijar acuerdos en asuntos prioritarios". La forista Cristina Coto preguntó por la congelación de la carrera profesional, que Fernández atribuyó a razones económicas "porque hay otras prioridades". Y al portavoz de C's le garantizó que el Principado destinará este año 75 millones a políticas de I+D+i, des después de que Nicanor García lamentara que "en Asturias se invierte poco y mal".
