La confluencia de las estrategias del sector metal liderado por su patronal, Femetal, y de Asturex para impulsar la internacionalización de las empresas asturianas aparece reflejada en el último acuerdo de concertación firmado esta semana pasada por el Gobierno regional, la patronal FADE y los sindicatos UGT y CC OO. El objetivo es trasladarla al conjunto de los sectores productivos de la región adaptándola a la situación y necesidades de cada uno de ellos.
El capítulo titulado "Impulso sectorial y mejora de la competitividad" desarrolla precisamente los primeros pasos a dar para avanzar en el cambio de modelo de la promoción económica. Una de las novedades del pacto es la búsqueda del desarrollo empresarial y económico no a través de las empresas de manera individual, sino de los sectores productivos de la región, teniendo en cuenta el potencial de cada uno de ellos y sus necesidades en las distintas ramas de actividad. Pero además, la concertación establece que "el impulso de la política sectorial ha de tener en los clústeres uno de sus pilares principales, entendiéndolos como nexo de unión entre el tejido empresarial y las herramientas multiplicadoras de la acción de la promoción económica del Gobierno".
Es decir, colaboración público-privada, una estrategia conjunta que permita ganar tamaño mediante consorcios, e internacionalización, para lo que se sincroniza el plan director de Asturex con la apuesta por los sectores productivos. Todo ello debe facilitar que se llegue a la relación entre grandes compradores internacionales y proveedores locales. Es el caso de Jacobs y el metal asturiano.
Según coincidieron en señalar los expertos consultados, esa confluencia de estrategias permite una mayor eficacia por cada euro invertido, con retorno a través de nuevas oportunidades de negocio.
