La Universidad de Oviedo se sitúa entre las 20 universidades del país con mayor rendimiento de un total de 66 instituciones públicas y privadas que han participado en el "Ranking CYD", elaborado por la Fundación Conocimiento y Desarrollo, que preside Ana Botín, presidenta de Banco Santander. Cataluña lidera la lista, mientras que Extremadura y Málaga ocupan los últimos puestos.

La institución académica asturiana obtiene los mejores resultados en la estadística comparativa en enseñanza y aprendizaje de Matemáticas y Biología, donde también destaca en la orientación internacional. Pero un dato muy significativo que revela el estudio es que la Universidad de Oviedo tiene un lugar destacado en la contribución al desarrollo regional, pero esta importancia para el territorio se traduce, sin embargo, en escasa repercusión económica. También suspende en publicaciones regionales, pero logra una buena nota en la facilidad para realizar prácticas en las empresas asentadas en el Principado.

La Fundación Conocimiento y Desarrollo presentó ayer el "Ranking CYD", que concluye que Cantabria es la región con más indicadores de alto rendimiento en sus universidades para la investigación y Navarra destaca en enseñanza.

El estudio se inició analizando siete ámbitos de conocimiento: Empresariales; Física; Ingeniería Eléctrica e Ingeniería Mecánica; Medicina; Psicología e Informática. En esta edición se han incorporado otros seis nuevos: Biología, Química, Matemáticas, Historia, Sociología y Trabajo Social. En todos ellos se estudian y comparan varios parámetros: enseñanza y aprendizaje; investigación; transferencia de conocimiento; orientación internacional y contribución al desarrollo regional.

En términos generales, el puesto más bajo en el que se sitúa la Universidad de Oviedo es en el apartado de enseñanza y aprendizaje, al situarse en el 43 del ranking nacional.

Sin embargo, en el apartado correspondiente a investigación sube al número 8; en transferencia de conocimiento se coloca en el 16; en orientación internacional, en el 10, y en la contribución al desarrollo regional, en el 21.

La institución asturiana también registra un alto rendimiento en la tasa de graduación con máster de un año, en el apartado de prácticas en empresas de la región y movilidad de estudiantes.

Estos son datos generales, porque cada uno de ellos tiene a su vez varios subapartados con una calificación independiente unos de otros. Esto supone que la nota general puede ser elevada pero en algunas cuestiones concretas se suspende. Eso es lo que ocurre, por ejemplo, en el caso de la contribución al desarrollo regional.

Francesc Solé, vicepresidente de la Fundación CYD, aseguró ayer en la presentación del informe en Madrid que aquellas comunidades autónomas con un entorno económico más desarrollado tiene "más fácil hacer transferencias", como se demuestra en los casos de Cataluña, que lidera el ranking, o del País Vasco, por poner dos ejemplos.