El Parlamento asturiano estrena barandilla tras casi dos lustros de espera. La escalinata que da acceso a la Junta General del Principado suponía un obstáculo para los mayores que se acercaban a "la casa de todos los asturianos". Hace ya varias legislaturas empezaron los trámites para que las escaleras no supusieran una barrera arquitectónica infranqueable. Como quiera que la sede de la antigua Diputación, hoy Junta General, es un edificio protegido, hubo que cumplir con los requisitos de la Comisión de Patrimonio. Tras años de papeleo y trámites, la barandilla se hizo a imagen y semejanza de la verja exterior y los mayores asturianos ya tienen apoyo para llegar a la Cámara autonómica.