El Colegio Oficial de Arquitectos de Asturias llega a su proceso electoral, que se celebrará el próximo día 31, con cuatro candidatos, dos hombres y dos mujeres, para suceder al actual decano, Alfonso Toribio. Casi 900 profesionales podrán ejercer su derecho al voto de forma presencial en la sede de Oviedo o bien por correo.
Felipe Uría, Sonia Puente y José Ramón Fernández Vázquez de Prada y Lorena Caro son los cuatro candidatos. Los tres primeros formaron parte de las juntas directivas encabezadas por Alfonso Toribio durante los seis años -dos mandatos- que estuvo al frente del Colegio.
La formalización de cuatro candidaturas es un hecho insólito, que sin embargo Toribio destacó como positivo. "Es muy positivo que los profesionales se impliquen con el Colegio, porque si no estamos unidos en instituciones que nos defiendan, estamos condenados al fracaso", aseguró el aún decano.
Toribio, que deja el cargo al cumplir el límite establecido estatutariamente, explicó las enormes dificultades a las que se enfrentaron las dos juntas de gobierno que encabezó. "Sufrimos la crisis económica que afectó a todo el país, pero además sufrimos la propia del sector, porque todo el mundo sabe lo que pasó con la construcción y, por extensión, con los arquitectos. Y por si eso fuera poco, se establecieron leyes que nos hacen las cosas aún más difíciles".
Pero aún con todas esas dificultades, su balance es positivo. "Cuando se trabaja en una causa en la que crees, es una satisfacción el esfuerzo que se hace", afirmó Toribio.
Llamada a la unidad
El aún decano también tuvo palabras de aliento para los candidatos a sustituirle en el cargo. "Es como aprender una profesión nueva, porque hay que trabajar en muchas áreas y la manera de aprender es trabajando. Es interesantísimo porque se tiene acceso a muchísima información y a hablar y tratar con muchas personas, y eso te da una mirada objetiva sobre muchos asuntos".
En todo caso, Alfonso Toribio aconseja a la persona que vaya a sucederle, "sea el que sea de los cuatro candidatos que se presentan", mucho trabajo e ilusión. "Por mucha dedicación que se aplique a diario, más de un año ya se necesita para conocer cómo funciona esto. Y eso que yo ya había sido vicedecano y había aprendido mucho. Pero ser decano te permite aprender muchísimo más, y también te obliga a esforzarte muchísimo más", afirmó.
Toribio se despide con un llamamiento a la unidad en el amplio colectivo de arquitectos colegiados en Asturias. "Es necesario estar unidos y apoyar al candidato que resulte elegido en defensa de la profesión y para que la sociedad nos considere como una parte esencial de ella".
