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Maestros y discípulos PABLO GARCÍA FERNÁNDEZ. | Profesor contratado doctor, coordinador del máster de Conversión de Energía Eléctrica | ÁNGEL NAVARRO RODRÍGUEZ. | Doctorando, exalumno del máster de Conversión de Energía Eléctrica | Maestros Y Discípulos

Pablo García Fernández: "En ingeniería, la Universidad de Oviedo está bien posicionada"

Ángel Navarro: "No existen suficientes iniciativas para los jóvenes investigadores en España, hace falta una apuesta decidida"

Pablo García Fernández: "En ingeniería, la Universidad de Oviedo está bien posicionada"

Pablo García (Luanco, 1975) entiende la enseñanza universitaria como un compendio de docencia, investigación e innovación. Hace diez años comenzó a trabajar como profesor en la Escuela Politécnica de Ingeniería de Gijón, faceta que compagina con la investigación a través del grupo acreditado "Lemur" (Laboratory for Electrical Energy Management Unified Research). Su capacidad innovadora fructificó con la puesta en marcha -de la mano de sus compañeros de área Pablo Arboleya, Jorge García y Cristina González Morán- del máster de Conversión de Energía Eléctrica y Sistemas de Potencia, uno de los más prestigiosos de España en el área de Medio Ambiente y Energía. Su éxito, explica, viene de la mano del desarrollo de un programa desarrollado íntegramente en inglés que las empresas ven con muy buenos ojos. "Los alumnos están comunicándose durante mucho tiempo de la formación con personas de fuera", argumenta Pablo, lo que repercute en un muy buen nivel de la lengua de Shakesperare entre quienes lo cursan.

Ángel Navarro (Albacete, 1989) es uno de los alumnos de las primeras promociones del máster. Cuando finalizó los estudios de Telecomunicación en la Universidad de Castilla La Mancha buscó en toda España una formación que se ajustara a sus necesidades. "Yo lo veo como una puerta al doctorado", afirma sobre los estudios que se imparten en la Universidad de Oviedo. "Para mí fue todo un poco nuevo", relata, porque venía de un grado en Ingeniería de Sistemas Audiovisuales de Telecomunicación. "Entre la oferta de másteres oficiales en España, este fue el que me convenció por su orientación a la investigación, ofreciendo contenidos actualizados y de calidad, además, que se impartiese íntegramente en Inglés fue un valor añadido", cuenta el joven. Eso, dice, "fue suficiente para ponerme al día". También se vio atraído por el hecho de que el programa de Conversión de Energía Eléctrica y Sistemas de Potencia naciera muy ligado al proyecto de Campus de Excelencia Internacional de la Universidad de Oviedo. ""Pocos másteres están tan bien organizados como éste y que ofrezcan una formación tan completa y específica a lo largo de dos cursos", subraya el alumno, que cursa el doctorado en el departamento de Ingeniería Eléctrica y Electrónica de la Universidad de Oviedo, financiado por una beca predoctoral Severo Ochoa-FICYT. Además, forma parte del grupo "Lemur" desde julio de 2014. Su investigación está orientada al estudio de microrredes eléctricas híbridas DC/AC y la mejora de la calidad en éstas mediante el estudio del comportamiento dinámico de la red y el uso de sistemas de almacenamiento de energía.

Pese a la oportunidad que a él se le brindó tras finalizar estos estudios en la Universidad de Oviedo, el joven ingeniero manchego lamenta que en España "no se apuesta por los jóvenes investigadores, no hay suficientes iniciativas". Si bien reconoce que algunos como él cuentan con el apoyo de becas predoctorales, otros compañeros optan por irse fuera en busca de una oportunidad "y tienen que buscarse ellos mismos las ayudas". Esos "cerebros" fugados que ya no pertenecen a España suponen un retroceso del 10% en capital humano según el informe elaborado por el Observatorio IUNE, donde se detalla que en solo cuatro años España tiene 12.418 investigadores menos. Cuentan los promotores del máster de Conversión de Energía Eléctrica que el principal objetivo de este posgrado es formar profesionales de alto nivel en algunos de los ámbitos más desafiantes de la ingeniería eléctrica, como el de las energías renovables (integración en redes inteligentes, diseño de sistemas y estrategias de control), el transporte eléctrico (análisis y diseño de vehículos eléctricos, redes eléctricas específicas), y la eficiencia energética (operación de redes inteligentes, análisis técnico-económico, gestión de proyectos). Esas tareas les han permitido colocarse entre los mejores de su especialidad. "Formamos gente que, a veces, cuando están desarrollando el proyecto fin de máster ya se quedan a trabajar en la compañía que los requirió", cuenta Pablo García. Los alumnos salen formados en las tecnologías más importantes de su área de especialización y las empresas valoran esa "muy buena formación" que reciben los chavales, continúa García.

Aun cuando los principales rankings de la Universidad española no colocan en las primeras posiciones a Asturias, el docente recuerda que en ingeniería "salimos muy arriba, estamos bien posicionados; a día de hoy en recursos materiales y de personal estamos bien cubiertos y el nivel es muy bueno", remarca. El problema, continúa García, surge cuando hay problemas de financiación porque no hay proyectos, pero no es su caso. De hecho, en el ranking I-UGR, elaborado por la universidades de Granada y Navarra, la asturiana se sitúa entre las primeras de todo el país en las disciplinas de Telecomunicación, Automática y Robótica, e Ingeniería Eléctrica y Electrónica, todas ellas vinculadas a la Politécnica de Gijón. "A veces los rankings están desvirtuados por el tamaño relativo de las universidades", subraya el coordinador del máster. Las colaboraciones establecidas en el marco de la titulación con compañías e instituciones líderes a nivel mundial hacen de este posgrado una oportunidad única para adquirir c las competencias clave demandadas en un sector especializado que evoluciona continuamente. Alumnos de otras promociones se quedaron a trabajar en empresas como Mercedes, Gamesa o Scotish Power, por citar algunos ejemplos de las oportunidades que se les brindan. Dentro de su faceta investigadora, un 50% de la primera promoción del mismo máster está realizando el doctorado en la Universidad de Oviedo, con lo ello representa para nutrir a la cantera asturiana.

La internacionalización es otra de las claves de este programa. Al posgrado oficial se suma un "Erasmus Mundus" con la Universidad de Nottingham -donde García realizó una estancia tras visitar también la universidad de Wisconsin-, junto a la de La Sapienza de Roma y el Instituto de Ingeniería de Coimbra.

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