El talento, la innovación y las nuevas tecnologías juegan ya un papel crucial en la evolución de la sociedad. Son tres pilares de futuro que deben funcionar de manera transversal, enlazados, para conseguir un efecto multiplicador en la región. Compromiso Asturias XXII, que agrupa a más de un centenar de asturianos que trabajan y residen fuera de la región, aportan un conjunto de ideas para avanzar en este campo tomando como ejemplo lo que se está haciendo en otros países, como Estados Unidos y el Reino Unido. Una buena gestión de los recursos es fundamental para dar buenos servicios a la población. De ahí que el uso del Big Data y el análisis de sus datos serán fundamentales para conseguir una buena gestión de los recursos, como ya se está haciendo en algunas partes del mundo. Por ejemplo en Seattle, que está inmersa en un proyecto piloto con Microsoft y Accenture para reducir el consumo de energía en un 25% en la zona financiera.

Las administraciones públicas también pueden jugar un papel fundamental como impulsores de las compras de productos y servicios innovadores, sirviendo como motor para que se produzcan mejoras y se desarrollen productos y servicios novedosos, lo que incrementará la competitividad de las empresas de la región. La cuarta revolución industrial, que es lo que representa el término "Industria 4.0" se está implantado en el mundo a marchas forzadas. Se trata de la transformación y la introducción de la tecnología digital en la industria. "Es un reto y una enorme oportunidad para todo el ecosistema del I+D+i del Principado", asevera Compromiso Asturias XXI en su documento "Buenas prácticas para Asturias".

Según la asociación, es básica la cooperación entre todos los agentes implicados para disponer de una industria innovadora y referente a nivel europeo. La Universidad, los grupos de investigación y los centros tecnológicos deben jugar un papel clave para determinar temáticas o ámbitos concretos.

La colaboración entre los agentes del ecosistema I+D+i con el tejido productivo permitiría no sólo retener talento, sino también atraerlo y además conseguir la proyección nacional e internacional de la región.

Para el intercambio de conocimiento, ciencia, tecnología y también de las artes digitales o electrónicas, los asturianos en la diáspora proponen la creación de "Asturlab": un centro de producción de ideas, innovación y colaboración cuyo objetivo sería la difusión de todos los avances que se están produciendo en la región y de la transmisión de objetivos.

La Universidad debería jugar un papel director encabezando y dirigiendo el desarrollo de un marco de trabajo que aglutinase no sólo a empresas asentadas en Asturias, sino también de cualquier parte del mundo, centros tecnológicos, universidades y a todos aquellos actores que puedan aportar innovación y conocimiento para trasladarlo a la sociedad.

Para impulsar todo ello es necesario activar fórmulas novedosas de financiación destinadas a los proyectos innovadores.