La menor avilesina de 16 años desaparecida desde marzo y buscada en la Costa del Sol en las últimas semanas ha sido finalmente localizada en la capital por la Policía Local de Málaga, cuyos agentes la detuvieron en virtud de la requisitoria judicial que pesaba sobre ella tras fugarse de un centro de menores de Torremolinos. Fuentes policiales aseguran que la localización de la chica se produjo la noche del pasado sábado. Una patrulla de policías locales encontró a las 23.45 horas a una joven que respondía a la descripción de la menor en la calle Mármoles, vía en la que la Policía Nacional había centrado infructuosamente la búsqueda durante la últimas dos semanas y donde algunos testimonios la situaban pidiendo agua en un conocido hotel. La versión policial añade que la menor intentó agredir a la agente que iba a proceder a cachearla antes de subirla al vehículo, tal y como establece el protocolo, aunque finalmente fue reducida y entregada al Grupo de Menores de la Policía Nacional de Málaga.

Aunque desde la Comisaría Provincial de Málaga se han negado a aportar cualquier tipo de información, fuentes de la familia aseguran que fue puesta a disposición de la Fiscalía de Menores y que el juez que se encarga del caso ha ordenado su ingreso en un centro de menores en régimen cerrado, ya que, dados los precedentes, la probabilidad de fuga es muy elevada. No obstante, la madre de la menor, que durante estas últimas semanas ha estado arropada por la asociación SOS Desaparecidos explicó a este periódico hace quince días que la niña se fugó en marzo de un centro de menores de Oviedo en el que había ingresado por petición de su propia progenitora, puesto que durante los últimos meses, sobre todo desde que conoció a un grupo de jóvenes, se fugaba de su casa de Avilés constantemente y se portaba muy mal. La familia perdió todo rastro hasta finales de mayo y principios de junio. Primero dio señales desde un restaurante de Mijas llamando a su abuela y después, ya en junio, se dirigió a una comisaría de la Policía Local de Torremolinos para pedir ayuda. «Estaba desorientada», contaba la madre antes de explicar que esto supuso el ingreso de la niña en el Centro de Protección de Menores Virgen de la Esperanza de ese mismo municipio como paso previo a su regreso a Asturias. No dio tiempo. La menor volvió a fugarse del centro, que denunció los hechos el 6 de junio.