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Montoro también ordena disolver tres empresas del Ayuntamiento de Gijón

Las sociedades de transporte, vivienda y festejos incumplen por su déficit la ley presupuestaria

Una vista de la sede central del Ayuntamiento de Gijón. ÁNGEL GONZÁLEZ

La alcaldesa de Gijón, la forista Carmen Moriyón, tiene sobre su mesa desde hace unos días una carta del Ministerio de Hacienda, que encabeza Cristóbal Montoro como ministro en funciones, exigiendo la disolución de tres empresas municipales por incumplir los preceptos de equilibrio financiero que establece la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local. Las firmas afectadas son la Empresa Municipal de Transportes Urbanos (Emtusa), la Empresa Municipal de la Vivienda (Emvisa) y Divertia Gijón, una empresa creada en 2014 a partir de la fusión de las sociedades del Teatro Jovellanos, el Jardín Botánico y la Sociedad Mixta de Turismo.

Gijón se suma así al largo listado de ciudades de toda España a las que se pide la disolución de empresas públicas y que en Asturias se destapó con la orden recibida en Mieres de cerrar de inmediato su empresa de autobuses. La conocida como ley de reforma local, a la que se opusieron frontalmente miles de municipios, impone la disolución automática de entidades públicas deficitarias. Aunque, como en el caso de Gijón, el Ayuntamiento tenga recursos económicos de sobra para su soporte. La misiva de Hacienda está siendo analizada desde Alcaldía y la concejalía del área.

Divertia es, de las tres empresas afectadas, la única que ha tenido problemas económicos serios. Este mismo lunes el Pleno aprobó una modificación del presupuesto -Gijón está en situación de prórroga- para aportar los 225.000 euros que la empresa de festejos necesitaba para salir de la situación de causa de disolución en la que estaba tras el cierre de la cuenta general de 2015. El Ayuntamiento es el único socio de esta empresa, cuyo presupuesto ronda los siete millones.

En el caso de la Empresa Municipal de Transportes Urbanos, que el año pasado cerró el ejercicio tras haber movido a más de 18 millones de usuarios, el Ayuntamiento se encarga cada año de equilibrar el balance de cuentas con lo que se denomina "aportación a pérdidas" y que se va gestionando en diversos pagos a lo largo del año. El cierre de 2015 fue con el saldo negativo de 8,5 millones. Los ingresos de la empresa no bastan para cubrir el coste real del servicio, entre otras cosas porque el 80% de los usuarios viajan bonificados. Hay gratuidad total para menores de 13 años y beneficiarios de bonos sociales y descuentos por usos de bonos temporales y tarjetas según edades. El billete ordinario está congelado desde 2013 en 1,25 euros.

La tercera sociedad del Ayuntamiento afectada es la Empresa Municipal de la Vivienda, que para equilibrar sus cuentas de 2015 necesito una aportación de casi un millón de euros de las arcas del Ayuntamiento. Emvisa trabaja con un presupuesto de 5,8 millones, de los que más de cuatro millones se reparten en ayudas directas para alquiler de viviendas o formalización de contratos; además de soportar convenios con otras entidades para apoyar el acceso a la vivienda. Su labor es eminentemente social y dependen de esa concejalía.

El Grupo Ayuntamiento de Gijón está integrado por siete empresas -además de las tres afectadas están la empresa de aguas (EMA), de limpiezas (Emulsa), el Centro de Empresas, y Cementerios de Gijón- y por tres organismos autónomos: la Fundación de Cultura, la Fundación de Servicios Sociales y el Patronato Deportivo.

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