El PSOE vive agarrado, "de momento", al dictamen de su Comité Federal que manda decir "no" a Mariano Rajoy. Aferrada a él subió María Luisa Carcedo a La Camperona, a la fiesta anual de los socialistas en las alturas del concejo de San Martín del Rey Aurelio, donde el matiz del "de momento" acompañó ayer a la certeza, repetida con insistencia de eslogan, de que "esa resolución está vigente". A la pregunta sobre una eventual repetición del cónclave para flexibilizar aquella negativa, prestando oído a las voces socialistas menos partidarias del "no" rotundo, la senadora asturiana hizo un quiebro hacia el PP. "El PSOE no puede estar permanentemente reinventándose", asegura, "cuando la tarea del partido más votado está sin hacer".
Carcedo sustituía en la cabecera del cartel de La Camperona al portavoz socialista en el Congreso, Antonio Hernando, anunciado como protagonista estelar y repentinamente ausente por el parto prematuro de su compañera. En su ausencia, y en la del secretario general de la FSA, Javier Fernández, la senadora declaró abierta la carrera por evitar el baldón de la culpa de las terceras elecciones antes incluso de que se convoque la investidura de las segundas. Rechazó la carga de la responsabilidad de una repetición de los comicios con la que dice que "el PP trata de chantajear al PSOE" y conminó a los populares a "hacer su trabajo", a que "si han destruido los puentes de negociación, los reconstruyan".
En la parte que les toca a ellos, Carcedo vuelve sobre el mandato del máximo órgano del partido entre congresos para replicar con un "el comité federal ha sido unánime, eso es lo que hay", a la mención de las palabras del expresidente Rodríguez Zapatero reclamando un proceso de reflexión interna. "Ya no sé cómo lo tengo que decir", dijo antes de comparecer ante un auditorio de cerca de dos centenares de militantes ganados de antemano para la causa. Redirigiendo el foco de la actualidad política sobre el PP, la senadora quiso combatir la estrategia popular del desplazamiento "de un ejército de medios de comunicación, opinadores y tertulianos para defender su posición" y de confiar tanto en el éxito de este "clarísimo intento de manipular a la opinión pública" que "no se molestan en elaborar una propuesta clara ni en trabajar para asumir su responsabilidad". También le llama la atención, hablando de estrategias de difusión, que tras las elecciones de diciembre "nadie reclamara a Rajoy apoyo para el candidato que dio el paso adelante".
Lamenta la dirigente socialista, por lo demás, que el centro del debate lleve demasiado tiempo concentrado en un "juego de tronos" en el que "están cómodos y en connivencia los populismos y la derecha" y deplora "el año que llevamos sin hablar de las políticas que interesan a la gente" .
En su turno, José María Pérez, presidente de la gestora del PSOE gijonés, hizo suya la interpretación en clave regional y la reclamación, dirigida a Podemos sin nombrarle, de "que la amplia mayoría" de izquierdas en la Junta "empiece a mojarse en defensa de lo que dijo defender en las pasadas elecciones autonómicas".
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