Los responsables de agencias inmobiliarias de la región aplauden la medida de regular los alquileres vacacionales, pero piden "ir más allá". César Nozal, coordinador de la Asociación Inmobiliaria de Asturias (Asocias), asegura que las viviendas que se arriendan durante períodos de larga duración están en la mayoría de los casos "muy deterioradas". "El Principado no lleva un control de los inmuebles. Algunos presentan barreras arquitectónicas importantes, otros no tienen calefacción y otros, no están ni siquiera en condiciones de habitabilidad", asegura Nozal, al frente de la agencia La Playa, de Gijón.
El colectivo de agentes inmobiliarios también se queja de que no hay un registro real de viviendas en alquiler. "El contrato que se firma entre dos particulares no queda constancia en ningún sitio. Sólo las agencias sabemos de ello. Pero creemos que hace falta un registro, que aporte una base de datos seria", sostiene Nozal.
La nueva moda de alquilar pisos por Internet no está castigando tanto a las inmobiliarias como a las hoteles. "Nuestros clientes son fieles, y repiten año a año, no buscan ese tipo de viviendas", indica Javier Gutiérrez, de la Agencia Álvarez. Son los jóvenes, y en concreto la generación "Millennials", los que más uso hacen de los portales de viaje. No obstante, los empresarios avisan de que los fraudes en la web son frecuentes. "Copiar en la red es fácil. El problema es que luego no existe la reserva y el dinero desaparece", advierte Gutiérrez. El copresidente de Otea, Fernando Corral, no cree que sea un problema de Internet, sino de gestión. "Hay que adaptar la ley a las nuevas formas de vida", remata.
