La Fundación Metal se salvará este año, aunque sea "in extremis". La convocatoria aprobada por el Gobierno central con 250 millones para planes de formación se ha visto con alivio en el patronato de la entidad, la más importante en su sector en la región y que ha formado a miles de trabajadores desde su constitución tanto en Asturias como en otras regiones del país y en otros países. Esto no supone abandonar el duro plan de ajuste que prepara y que supondrá reducción de plantilla y una reestructuración semejante al que se tendría que aplicar en una empresa que se sometiera a un preconcurso de acreedores.
La falta de convocatorias por parte de la Administración provocó que las cuentas de la fundación entrasen en números rojos. Los contratos con empresas privadas son insuficientes para mantener la estructura de la entidad, que ahora se tendrá que modificar para adaptarse a la nueva situación y a unos perfiles profesionales concretos.
El Principado ya resolvió la convocatoria de los cursos de formación a la carta para empresas con compromiso de contratación para el 60 por ciento de alumnos. La Fundación Metal será la encargada de impartir muchos de ellos. También lo hará en aquellos casos en los que la patronal del sector, Femetal, se haya presentado y ganado.
Pero la cuantía más elevada corresponde a la convocatoria del Gobierno central, la primera abierta en su totalidad a la libre concurrencia de centros.
En esta ocasión se considera prioritaria la formación en las áreas relacionadas con la digitalización y las tecnologías de la comunicación, la internacionalización y el emprendimiento. Así, en esta línea se incorporan 32 millones de euros no ejecutados en el presupuesto de 2015.
Para la Fundación Metal esta convocatoria es "muy buena noticia" y su cúpula está convencida de que pese a que son concursos que hay ganar, la entidad lleva cinco años consecutivos siendo beneficiario con la máxima financiación que se concede por la calidad y el precio ajustado de sus ofertas.
Para otras organizaciones de su tamaño la mayor complicación deriva de cómo resolver el problema de la financiación, que resulta demasiado gravosa y que ya obligó en distintas comunidades autónomas al cierre de varias empresas de formación.
La consecución de los cursos puede suponer que el Estado adelante como mucho el 60% de la inversión repartido en dos plazos. Pero se tarda meses en recibir los fondos, lo que implica que durante ese tiempo es la propia entidad la que tiene que adelantar la financiación, y además los gastos financieros no son costes elegibles.
El 40% restante es abonado una vez que se justifica que se ha realizado la formación, se presentan todos los justificantes y son revisados. Se puede tardar otro año. Aún así, en la Fundación Metal aseguran estar esperanzados, ya que además se están consiguiendo más contratos con empresas privadas.
Pero mejores perspectivas no implica que se abandone el plan de ajuste y reestructuración. Al contrario. Ya se está ultimando y el patronato pretende aprobarlo el próximo mes de septiembre y ponerlo en marcha con carácter inmediato. "Hay que reestructurar el modelo y atender a la línea mercantil, no sólo a la financiación pública. Eso supone una nueva forma de hacer las cosas adaptándose a los nuevos tiempos y al rápido avance de la aplicación de la tecnología", explicaron desde la entidad.
Formación continua
"La industria 4.0, que se implantará de manera muy rápida, requiere otros perfiles profesionales distintos a los tradicionales, y una formación continua y de calidad que la fundación está preparada para impartir", añadieron.
El metal asturiano tendrá que hacer frente en esta década la jubilación de unos 9.000 trabajadores, lo que conllevará adaptar la formación a los nuevos tiempos y tecnologías que requiere el sector con el relevo generacional.
Desde la Fundación Metal aseguran que "es un reto que hay que afrontar ya y por servicio, formación y valor que aporta la entidad, hay indicadores clarísimos de que es necesaria y que las empresas, por presupuesto, calidad y precio nos seguirán dando su confianza".
