La alcaldesa de Madrid, ciclista en la Senda del Oso

Algo más de veinte kilómetros en bicicleta por la Senda del Oso. Ese es el recorrido que hizo ayer la Alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, junto a un grupo de amigos con los que comparte dos días de descanso en Proaza que finalizan hoy. La regidora de Ahora Madrid debe estar en la capital de España mañana para continuar con sus gestiones al frente del Consistorio madrileño. Carmena aseguró sentirse "encantada" con su visita a Asturias. "El clima es genial, son sólo dos días, algo cortito, pero están siendo muy buenos", afirmó.

Con ropa deportiva y preparada para la acción con un casco, salió Carmena de Proaza a las diez de la mañana directa a la Senda del Oso. La alcaldesa madrileña inició la ruta con una bicileta eléctrica que abandonó en medio del itinerario por una de montaña. Sin tracción. El grupo disfrutó de un agradable paseo por la vía turística, que recorre los valles del Trubia, hasta Teverga, donde dieron la vuelta. "Había estado con mis hijos en Asturias pero esta vez he venido con un grupo de amigos, que somos aficionados a la bicicleta", comentó Carmena a su llegada a Proaza.

A la villa proacina llegaron alrededor de las tres de la tarde para disfrutar de una comida en el mismo establecimiento donde están alojados. Allí, los comensales se quedaron ojipláticos con la presencia de la Alcaldesa de Madrid. "Me llevé un susto... no podía creer que fuera ella y sí, sí, era ella", señaló María de los Ángeles Serradilla, turista extremeña.

Lo cierto es que la presencia de Carmena en Proaza no ha pasado desapercibida para nadie. "La ví pasar en bici por la mañana y me parecía una cara conocida pero de esto que no te das cuenta pero cuando la escuché hablar... tiene la voz exacta a la que sale por la tele", señaló Cristina Rodríguez, hostelera de Proaza. La mujer estima que la presencia de Carmena en el concejo servirá para publicitar la zona.

Carmena se paró y conversó con todo aquel que la requirió estos días en Proaza, dejando en el concejo buenas sensaciones. "Me sorprendió gratamente la verdad, se da mucho a la gente y es encantadora", comentó una hostelera que prefiere mantener el anonimato porque "Carmena es cliente", indicó. En su local, disfrutó de una comida. Y también se dejó ver en la noche del miércoles cenando con los amigos en otro local del pueblo. David Menéndez recordó su encuentro: "Salí a tirar la basura al contenedor y allí estaba Manuela Carmena", señaló sonriente.

Carmena conquistó a los proacinos y turistas por su cercanía. "La hemos visto y la saludamos pero no pensamos que se fuera a parar, nos hemos quedado helados... La animamos a continuar el trabajo porque no nos arrepentimos de haberla votado", manifestó Sofía Casas, turista madrileña. Carmena deja hoy los valles del Trubia para regresar a Madrid tras unos días de descanso deportivo y con el agrado de vecinos y visitantes.