La esperada rebaja de 15 minutos en los tiempos de viaje del Alvia entre Asturias y Madrid, debido a la entrada en servicio del sistema de seguridad del AVE (ERTMS) en el tramo de León a Valladolid, acumula nuevos retrasos. En un principio, la inauguración del dispositivo estaba prevista para el pasado septiembre, pero los problemas con la instalación de los equipos la trasladó al próximo diciembre. La fecha que se maneja ahora es junio de 2017. A causa de la falta de maquinistas para realizar las pruebas, según informó ayer Diario de León.

El tramo del AVE entre Valladolid y León fue inaugurado en septiembre de 2015 con un equipamiento de control de la circulación menos exigente que el específico para Alta Velocidad. Se trata del denominado ASFA, que limita la velocidad de los Alvia Gijón-Madrid a 200 kilómetros por hora. Una vez que se active el ERTMS, el tren podrá alcanzar los 250 kilómetros por hora entre León y Valladolid, la misma velocidad a la que transitan ya desde la capital pucelana a Madrid. El recorte de un cuarto de hora permitirá recorrer el trayecto de Oviedo a Chamartín en 3.45 horas, y desde Gijón en cuatro horas y diez minutos.