Los vecinos de Salinas (Castrillón) son muy de la Virgen del Carmen, que para eso es su patrona, da nombre a las fiestas más importantes, sale en procesión hasta la playa y hasta la iglesia está consagrada a su advocación, pero ayer le hicieron un hueco en su devocionario a la Virgen del Pilar, patrona de las Fuerzas Armadas, con un gesto dirigido a los siete agentes de la Guardia Civil destacados en el cuartel de la localidad. Y es que el vecindario ha costeado la compra de una "Pilarica" para regalarla a la Benemérita en prueba de agradecimiento por su compromiso con Salinas y los servicios que allí presta. La talla presidió por primera vez la misa con la que Salinas -en una iglesia llena hasta la bandera- celebró la fiesta nacional y en la que los representantes de las Fuerzas Armadas y de los cuerpos de seguridad del Estado ocuparon un puesto preferente.

Por ausencia del sargento al mando del puesto, Antonio Tarón Aguirre, le tocó agradecer el detalle al veterano agente Juan Carlos Moreno, quien al término de la misa y en compañía del resto de agentes saludó marcialmente a los vecinos que acudieron al oficio religioso. La ceremonia contó con la colaboración musical del coro ovetense Alfredo de la Roza y la dirección religiosa del sacerdote Agustín González Moreda.