José Ángel Fernández Villa, exsecretario general del SOMA, permanecía ingresado ayer por la tarde en la planta de Medicina Interna del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), según confirmaron a este diario fuentes del centro sanitario. El otrora todopoderoso líder minero permanece postrado en la cama, acompañado de su esposa, María Jesús Iglesias, a la espera de que se determinen las causas por las que sufrió un desvanecimiento durante la noche del pasado miércoles. Su aspecto es de avanzado deterioro físico, indicaron las mismas fuentes hospitalarias.

Villa tiene pendiente un nueva prueba neurológica que determine si está en condiciones de prestar declaración en relación a la querella por apropiación indebida presentada por el sindicato minero que dirigió con mano de hierro durante más de treinta años. El catedrático de Neurología Alfredo Robles Bayón, de la Universidad de Santiago de Compostela, ha sido propuesto por el SOMA para efectuar el análisis y está citado este viernes en el Juzgado número dos de Oviedo para que comunique si acepta o no la designación.

Determinar si el estado de salud de Villa le permite testificar es de la máxima relevancia para un proceso penal en el que ya han prestado declaración varios testigos, entre ellos José Antonio Postigo. LA NUEVA ESPAÑA ya desveló el pasado 20 de marzo el contenido de las grabaciones en vídeo de las declaraciones de todos los testigos, unos días después de que prestasen testimonio.

Recurso

El nuevo examen neurológico a Villa fue autorizado por la jueza que lleva el caso, Simonet Quelle Coto, a instancias del SOMA. La defensa del exsindicalista, a cargo de la letrada Ana García Boto, recurrió la decisión ante la Audiencia Provincial, que rechazó su pretensión al entender que la prueba resulta pertinente. La familia del exlíder minero también se ha posicionado en contra de ese análisis por boca de su esposa. María Jesús Iglesias subrayó hace unos días que no lo considera necesario, ante la evidencia de que su marido no se encuentra capacitado para comparecer. Asegura que su estado está tan deteriorado que le ha dicho que va a volver a hacerse cargo del sindicato y que Pedro Sánchez le ha llamado para que ocupe el número tres de la lista del PSOE en unas elecciones generales.