La terminal cántabra de Parayas, principal competidora de la de Asturias y gran referente del vuelo de bajo coste ("low cost") en la Cornisa, se desploma justo cuando el aeropuerto del Principado confirma una recuperación que le ha permitido enlazar 19 meses ganando pasajeros gracias, fundamentalmente, a los nuevos enlaces con Londres y a la entrada de Iberia Express en el corredor con Madrid-Barajas. Las cifras facilitadas por el gestor Aena hablan por sí solas. El aeródromo de Santiago del Monte sumó entre enero y septiembre 983.885 viajeros, lo que supone un 13% más que en el mismo periodo del año anterior. El de Santander, utilizado por numerosos asturianos para conexiones internacionales con vuelos baratos, escapa a la tendencia alcista que se registra en toda la red estatal y se queda en 607.208 usuarios, con una reducción del 12% respecto a los tres primeros trimestres de 2015.
La brecha entre ambos aeropuertos se agranda, supera ya los 376.000 viajeros y pone en cuestión el modelo cántabro de fiar el desarrollo de la terminal a un "gigante" del vuelo barato como Ryanair, que en comunidades de pequeño tamaño del estilo de la vecina se mueve en función de los convenios económicos con las Administraciones. La aerolínea salió de Asturias de imprevisto en 2013, pese a las buenas ocupaciones en las rutas a Madrid y a Barcelona, justo después de firmar su último contrato millonario con el Gobierno cántabro.
El desplome del pasaje en Cantabria, que llegó al 20% en el turístico mes de agosto, guarda relación directa con el recorte aplicado por Ryanair en sus rutas desde Parayas muy pocos meses antes de renegociar el convenio con el Gobierno autonómico, que expira a finales de este año y por el que recibe 3,2 millones de euros anuales. Fráncfort, Sevilla, Gran Canaria, Lanzarote, Valencia y Palma de Mallorca desaparecieron de un plumazo de la programación de la compañía irlandesa para la campaña estival en la terminal santanderina, lo que fue interpretado en la comunidad vecina como una medida de presión de la aerolínea para renovar al alza su contrato con la Administración regional. De lo que no cabe duda es de que estos tijeretazos a la cartelera han provocado una notable bajada del número de viajeros y un debate sobre la política aeroportuaria. El PP, en la oposición al regionalista Miguel Ángel Revilla, que gobierna apoyado en el PSOE, ha solicitado una reunión urgente del comité de coordinación aeroportuaria para analizar las causas de lo que considera "desenfrenada caída" del pasaje en Parayas y las medidas necesarias para ponerle coto.
Más compañías
La dependencia que tiene de Ryanair el aeropuerto de Santander -donde también operan Vueling, Air Nostrum, Iberia y Volotea- queda bien de manifiesto si se tiene en cuenta que casi ocho de cada diez usuarios de la terminal utilizan los vuelos de la compañía irlandesa. Vueling fue la aerolínea más utilizada el pasado año en Asturias, pero no pasó de tres de cada diez pasajeros debido a que la oferta de vuelos en Santiago del Monte está más diversificada, superando a Parayas en el número de compañías. En concreto, en la región operan ahora Easyjet, Iberia, Iberia Express, Air Nostrum, Vueling, Air Europa, Volotea y Tap.
La intención del Gobierno cántabro es cerrar las negociaciones con Ryanair antes de fin de año. La oferta de la aerolínea incluye ahora como destinos Barcelona, Málaga, Tenerife, Berlín, Düsseldorf, Bruselas, Dublín, Milán, Roma, Edimburgo y Londres. El objetivo es mantener estas rutas y sumar alguna más para remontar el vuelo.
