El debate sobre el estado de la región no parece alterar los planes de un Gobierno que mantiene su hoja de ruta pese a haber perdido a su único aliado, IU, en el viaje con curvas sinuosas y estrechas que se presume en la legislatura del pluralismo político. La próxima parada será el Presupuesto. En un mes, el Ejecutivo de Javier Fernández sabrá si le salen las cuentas para sacar adelante un proyecto de Presupuesto, que superará en más de 200 millones al pactado en 2015 con el PP. De momento, sólo cuenta con 14 votos, los de su grupo parlamentario. Empieza el sudoku para la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, que se encontrará con los obstáculo añadido que supone el acercamiento confeso de IU a Podemos, acelerado por la abstención del PSOE que allanó la investidura de Mariano Rajoy. A Javier Fernández, al que se apreció cierto cansancio por momentos en el debate, le quedará como último recurso aceptar la oferta de Mercedes Fernández en sucesiones.