Los aficionados a la fotografía persiguieron en la noche del lunes a la "superluna" hasta el mismo corazón de los Picos de Europa. Veinticinco personas participaron en una singular ruta nocturna, con salida y llegada en Fuente Dé, que incluyó un taller de fotografía para capturar un fenómeno que no se volverá a repetir, con la intensidad que se vivió en las últimas horas, hasta dentro de 18 años.

Jesús Prellezo, del hostal Remoña, y Andrés de la Torre, guía de los Picos de Europa, fueron los arquitectos de esta singular iniciativa, que se gestó en apenas unas horas. "Lo preparamos todo el domingo por la tarde. Habíamos puesto un límite de 14 personas, porque íbamos a una cabaña pequeña, pero las peticiones nos desbordaron", explica De la Torre.

El grupo inició la ruta pasadas las diez de la noche, y ya era medianoche cuando llegó a Campudaves: "Es una pradera muy bonita, a 1.500 metros, y un sitio ideal porque la Luna, que está justo enfrente, te ilumina la pared. Es perfecto para hacer fotografía nocturna, por eso incluímos un pequeño taller de fotografía", relata De la Torre.

Allí, en el corazón de los Picos de Europa, con la "superluna" presidiendo la reunión, el grupo compartió unos frixuelos y un chocolate antes de retornar a Fuente Dé.