Dando cobertura a una "antigua aspiración", el Gobierno del Principado concedió ayer naturaleza de decreto a la clarificación de las relaciones entre el sistema sanitario y el de servicios sociales. La medida, que establece las estructuras de coordinación entre el personal de las dos consejerías, pone las bases de lo que en el primer semestre de 2017 debe ser el Plan Sociosanitario del Principado 2016-2020 y comenzará a principios del próximo año con una experiencia piloto en la residencia mixta de Gijón.

Allí se instituirá la primera "unidad de convalecencia", pensada inicialmente para entre doce y catorce residentes de geriátricos públicos, ampliable a 75 en una segunda fase, y se aplicará a personas que después de una estancia hospitalaria y sin alta médica podrán recibir cuidados y atención médica específica dentro de las residencias del organismo Establecimientos Residenciales para Ancianos (ERA).