En las pescaderías asturianas ya hay marejada de compras navideñas. A dos semanas de Nochebuena, las ventas de pescado se disparan para evitar la subida de más de un 20% en los precios. El rey de los congelados es el pixín, cuya pieza ya ha experimentado un ligero incremento. A partir de ahora continúa el frenético ascenso en los mostradores. Y los clientes lo saben. "Cada vez son más previsores. Si antes compraban para congelar 1 de cada 10, ahora lo hacen 4 de cada 10", asegura Ramón Agustín García, más conocido como "Monchi Candás", en su establecimiento del Fontán.
Ayer el céntrico mercado de Oviedo estaba a rebosar de miradas. Durante toda la mañana "fue un no parar". "Desde octubre ya llevamos vendiendo para congelar. Sobre todo son piezas grandes y el ahorro es importante", reconoce Isabel Álvarez, de la pescadería Milagros. En el puesto de La Sirena del Cantábrico, Juan Carlos Álvarez ya aprecia "barullo" estos días: "Las ventas se están animando bastante. Lo que más piden es pixín y almejas". Con todo, los pescaderos prevén una buena campaña navideña, aunque cada año va teniendo menos fuerza. "Estas fechas se están perdiendo. Vamos a menos, porque también cambian las costumbres. Se juntan menos personas y se puede comer pescado durante todo el año", explica Sergio García, responsable de Pescados y Mariscos Luis, que concreta que la caída de ventas en trece años es "de por lo menos el 50%".
¿Y qué dicen los consumidores? Mejor adelantar las compras de Navidad antes que pagar el doble por un besugo, un rape o un virrey. "Ya ni compro pescado en estas fechas. Lo único, langostinos", dice María Josefa Menéndez mientras espera turno. Teresa Velasco, en cambio, encargó ayer una merluza para llevar a Valencia, donde ahora vive.
En las rulas, la marea de peces se mueve bastante poco. Los marineros llaniscos no son muy optimistas de cara a la campaña de Navidad que tan buenos beneficios les proporcionó en años anteriores. Paradójicamente el buen tiempo de las últimas jornadas y el hecho de que salgan a la mar a diario puede serles perjudicial, debido al exceso de género. "Hasta la fecha los precios están siendo muy bajos, aunque confiamos en un repunte de cara a las dos próximas semanas", asegura el patrón mayor de la cofradía de pescadores de Llanes, Ángel Batalla. El besugo, el rape, la lubina y el xárago serán, durante los próximos días, los productos por los que más pujen los vendedores en la rula.
Carlos Menéndez de la Torre, que es el encargado de subastar pescado en Lastres, explica que en los últimos años "ya no se notan las fiestas, hay mucho pescado de importación y ya nadie espera a estas fechas para tener un besugo, los hay todo el año". Tampoco en Ribadesella aprecian movimiento ante la proximidad de Navidad. Los pescadores andan a la angula, aunque se ve poca. El jueves se vendieron algo más de dos kilos a 405 euros, un precio bueno para el momento pero debido a la escasez. Con vistas a las fiestas "algo más valdrá. Pero no creo que vaya a subir mucho de precio", estima el secretario de la cofradía riosellana, José Manuel Gutiérrez.
En Puerto de Vega, el percebe será el rey en las mesas. La lonja local es la que más kilos de esta especie rula de la región, y aglutina a buena parte de los mariscadores del occidente. "Estamos a la expectativa. El lunes se abren las piedras que se han reservado para esta época, y buena parte del resultado de la campaña depende de estos días", apunta el secretario de la cofradía, Marcelino Gión, que indica que los precios dependerán del estado de las mareas y de cómo se encuentre el mercado, sobre todo el gallego.
